La tecnología no solo ha cambiado nuestra manera de comunicarnos y relacionarnos. Cada día nos encontramos con más ejemplos de internet de las cosas en la vida cotidiana, así como observamos que está transformando la industria. La robótica, la Inteligencia Artificial y el Internet de las Cosas aplicados a la industria han puesto en marcha una transformación radical en las operaciones de los negocios que muchos ya han calificado como la Cuarta Revolución Industrial.
El IoT en la industria, también conocido como IoT industrial, hace referencia al uso de sensores inteligentes y mecanismos de automatización que permiten mejorar la eficiencia de los procesos industriales en diferentes niveles. Consiste en conectar máquinas, dispositivos y sistemas empresariales mediante la arquitectura de red para que puedan comunicarse, recopilar información y analizar esos datos en tiempo real. Con la aplicación del IoT en la industria, las personas, las máquinas y los datos trabajan de manera sincronizada para ofrecer un valor añadido.
Los ejemplos de IoT en la industria abundan. MAN, la empresa fabricante de camiones y autobuses, ha proporcionado a sus clientes un rastreador que detecta fallos en el motor u otras averías en los vehículos para que puedan solucionarlo a tiempo y realicen el mantenimiento preventivo según lo previsto.
Caterpillar, una de las empresas pioneras en aplicar sistemas IoT a la industria, usa esta tecnología, junto a la Realidad Aumentada para ofrecer a los operadores una vista rápida del funcionamiento de la máquina, desde los niveles de combustible hasta cuándo es necesario reemplazar los filtros de aire. Así evitan costosas averías y se aseguran de que sus empleados trabajen con seguridad.
Amazon también está apostando por la industria 4.0. Uno de los ejemplos más famosos son sus robots Kiva, que se encargan de recoger los objetos de las estanterías del almacén para llevarlos a su destino siguiendo rutas óptimas, que pueden elegir en tiempo real gracias a algoritmos que potencian su sistema de Inteligencia Artificial.
Maersk, la empresa especializada en transporte que mueve millones de contenedores por todo el mundo, usa el Internet de las Cosas para dar seguimiento a sus activos y optimizar el consumo de combustible y las rutas marítimas, algo particularmente útil en el caso de los contenedores refrigerados cuyo contenido podría estropearse si no se controla la temperatura y los tiempos de entrega.
North Star BlueScope Steel, uno de los principales fabricantes del mundo de productos de acero, ha implementado dispositivos portátiles en cascos y muñequeras para dar seguimiento a sus empleados y detectar escenarios peligrosos antes de que provoquen lesiones. Esos dispositivos IoT también recopilan métricas de salud para que los supervisores den un descanso a los trabajadores cuando lo necesiten y alertan de la presencia de gases tóxicos.
Si te interesa todo lo relacionado con el Internet de las Cosas y la industria 4.0, estos programas te vendrán como anillo al dedo: