
Deporte
El entrenamiento funcional es un tipo de ejercicio que se parece a los movimientos que haces en tu vida diaria. Puede ser útil para el rendimiento deportivo, la prevención de lesiones y otras tareas físicas en la vida cotidiana.
Tanto para atletas elites como aficionados de deporte y fitness amateur y de todos niveles, el entrenamiento funcional es fundamental para llegar a cumplir cualquier reto deportivo y mantenerse en forma.
En este post, veremos más en detalle qué es el entrenamiento funcional. Y si quieres profundizar más o estás pensando en una carrera profesional como entrenador de acondicionamiento físico, deberías considerar el Grado en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte en Madrid o Cafyd en Canarias.
El entrenamiento funcional es un entrenamiento con un propósito: mejorar las actividades físicas en otras áreas de la vida diaria. En la mayoría de los casos, el objetivo es mejorar en las actividades cotidianas, como agacharse cómodamente para recoger algo, mover objetos que pesan de manera segura o correr hacia el autobús.
Una sesión de entrenamiento funcional tiene como objetivo ayudarte a estar más fuerte para mejorar tu vida fuera del ejercicio, haciendo que las actividades diarias sean más cómodas y más naturales de realizar.
Los orígenes del entrenamiento funcional tienen sus raíces en las profesiones de rehabilitación, de ahí su orientación a objetivos. Los terapeutas físicos y ocupacionales utilizan el entrenamiento funcional para ayudar a los pacientes con el movimiento, a menudo después de una cirugía o una lesión. Por ejemplo, un paciente con un trabajo que implicaba levantar mucho peso suele hacer una rehabilitación dirigida a fortalecer su capacidad para levantar objetos.
A continuación, te explicamos algunas de las ventajas más importantes del entrenamiento funcional:
Hay una gran variedad de ejercicios funcionales que puedes hacer durante un entrenamiento, pero igual estos ejemplos son los más conocidos:
Como cualquier rutina de ejercicios, el descanso y la recuperación son esenciales para ayudarte a ver los resultados deseados y conseguir tu objetivo deportivo. Además, la intensidad del entrenamiento determinará cuántos días a la semana entrenas. Debido a que los entrenamientos funcionales suelen ser entrenamientos de cuerpo completo, es una buena idea tomarte un día de descanso entre sesiones.
Es necesario entrenar al menos dos días a la semana para la salud de los músculos y los huesos, pero puedes entrenar de esta manera hasta 4 días a la semana si tu cuerpo se recupera bien y te sientes con energía cada vez que entrenas.
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