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Deporte
El ultrasonido terapéutico existe desde los años ‘40 y es solo una de las muchas técnicas efectivas y comunes que se utilizan en la fisioterapia hoy en día. Este proceso sirve para proporcionar efectos de calentamiento profundo a diferentes partes del cuerpo, como tendones, ligamentos y músculos.
Pero, ¿para que se utiliza el ultrasonido en fisioterapia? ¿Y cuáles son los efectos? En este post, veremos más en detalle el uso de ultrasonidos y las ventajas para la recuperación de una lesión. Y si deseas una carrera profesional como fisioterapeuta deportivo, igual deberías pensar en estudiar el máster Alto Rendimiento Deportivo de la escuela Real Madrid o el máster Alto Rendimiento Deportivo Online en la Escuela Universitaria Real Madrid - Universidad Europea.
El ultrasonido sirve para tratar una variedad de lesiones y condiciones. Los usos más comunes del ultrasonido en el entorno de la fisioterapia involucran lesiones musculares y de tejidos y dolor crónico.
Ha sido efectivo para lesiones deportivas, tendinitis, bursitis y una variedad de lesiones de ligamentos y tendones. También se usa para tratar el dolor lumbar, los esguinces y las contracturas articulares. Al aflojar el tejido, quemar los desechos celulares y mejorar la circulación en las áreas tratadas, a menudo se aumenta el rango de movimiento.
Las ondas de ultrasonido se administran mediante el uso de una varita que se coloca directamente sobre la piel del paciente, generalmente utilizando un gel protector.
Los tiempos de tratamiento para cualquier área son generalmente entre 3 y 5 minutos. Las ondas de sonido, o rayos de ultrasonido, penetran dentro del cuerpo generando calor, aumentando el flujo sanguíneo y relajando los músculos y los tejidos conectivos, reduciendo así el dolor y los espasmos musculares. La estimulación de estos tejidos de esta manera fomenta la reparación y puede reducir en gran medida el tiempo de curación de ciertas lesiones.
Un ultrasonido utiliza ondas de sonido de alta frecuencia para afectar los tejidos y músculos del cuerpo. De hecho, la terapia de ultrasonido ofrece una serie de ventajas para la salud. A continuación, te contamos cuáles son los efectos y beneficios del ultrasonido:
Para empezar, el ultrasonido terapéutico puede ayudar a aliviar el dolor. Mientras trata el tejido profundo de tu cuerpo, el ultrasonido también disminuye los espasmos musculares. Los espasmos y la tensión muscular puede estar relacionado con la causa raíz de tu dolor. El fisioterapeuta suele utilizar el ultrasonido como parte del tratamiento ya que puede preparar los músculos para tratamientos terapéuticos adicionales.
Según la Organización Mundial de la Salud, las lesiones musculoesqueléticas son el segundo mayor contribuyente a las discapacidades en todo el mundo. El dolor musculoesquelético ocurre cuando hay daño en el tejido muscular. Si bien el desgaste general puede causar este daño, el trauma también tiene un factor. Eso incluye:
El ultrasonido puede dar a los tejidos el calor profundo que necesitan para aliviar la tensión. Cuando el ultrasonido aumenta el flujo sanguíneo, hace que las células sean más receptivas para la recuperación.
El aumento del flujo sanguíneo puede ayudar a reducir la hinchazón alrededor del área lesionada. También reduce la inflamación crónica, que está asociada con una serie de problemas de salud (incluida la artritis).
Si tienes una lesión reciente con inflamación aguda, tu fisioterapeuta puede configurar el ultrasonido en pulso. En lugar de generar un efecto de calor, esto hace que la sangre fluya para reducir tu dolor.
El efecto acústico causado por la terapia de ultrasonido crea pequeñas microvibraciones. Estas vibraciones afectan las fibras que causan la formación de tejido cicatricial. Descomponer el tejido cicatricial puede ayudar a aumentar tu rango de movimiento. También te ayuda a mantener ese rango de movimiento para un alivio más prolongado.
La terapia de ultrasonido puede penetrar profundamente para relajar la musculatura más profunda o los tejidos de las articulaciones.
Para que esto suceda, las ondas de sonido de la máquina hacen que los tejidos del cuerpo vibren. Esto genera calor mientras aumenta la fricción hasta un nivel molecular. Luego, los tejidos aumentan de temperatura.
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