Este término hace referencia a la sensación de realizar tareas repetitivas y sin sentido, que no aportan valor ni al empleado ni a la organización, generando sentimientos de frustración y desmotivación.
Si te interesa saber más sobre cómo fomentar el bienestar de los trabajadores de una empresa y cómo abordar trastornos como la sisifemia, en el Grado en Relaciones Laborales y Recursos Humanos, el Máster en Recursos Humanos online y el Máster en Prevención de Riesgos Laborales de la Universidad Europea encontrarás las herramientas necesarias para comprender y actuar sobre estos desafíos en el ámbito laboral.
A continuación, exploraremos qué es la sisifemia, cómo afecta a la salud mental de los empleados y qué medidas pueden tomarse para prevenirla.
La sisifemia es un trastorno laboral que se caracteriza por la sensación de realizar tareas interminables y sin propósito, donde los trabajadores se ven obligados a esforzarse cada vez más sin recibir ningún tipo de recompensa o reconocimiento.
El nombre de este fenómeno tiene su origen en la mitología griega, en la figura de Sísifo, quien fue condenado a una vida monótona. Este trastorno describe el estado de aquellos trabajadores que se sienten inmersos en una rutina interminable que resulta frustrante y agotadora, tanto a nivel personal como profesional.
Aunque la sisifemia y el burnout presentan síntomas similares, como el agotamiento emocional y la pérdida de motivación, no son lo mismo.
El burnout se asocia principalmente con el estrés prolongado y la sobrecarga de trabajo, mientras que la sisifemia surge cuando el empleado percibe que las tareas que realiza carecen de sentido o propósito.
En el burnout, la causa principal es la presión externa por cumplir con un volumen excesivo de trabajo. Sin embargo, en la sisifemia, el problema es la monotonía y la falta de valor percibido en las actividades que se realizan.
La aparición de la sisifemia está relacionada con una serie de factores, entre los que destacan:
De este modo, en un contexto donde las empresas no brindan posibilidades de crecimiento, innovación o participación en proyectos motivadores, la sisifemia puede proliferar rápidamente.
El departamento de Recursos Humanos juega un papel fundamental en la identificación y gestión de la sisifemia. Este trastorno no solo afecta la salud mental de los empleados y causa desmotivación, ansiedad y bajas laborales, sino que también repercute en la productividad y el rendimiento de la empresa.
Para prevenir y gestionar la sisifemia, los profesionales de Recursos Humanos deben implementar políticas de bienestar laboral y prevención de riesgos psicosociales. Estas políticas pueden incluir encuestas sobre el clima laboral, un seguimiento individualizado de los empleados y programas de reconocimiento.
Además, promover un entorno laboral diverso y ofrecer oportunidades de desarrollo profesional contribuyen a reducir la monotonía y la frustración, lo que, a su vez, mejora la satisfacción y el compromiso de los trabajadores.
Prevenir la sisifemia es esencial para mantener un entorno laboral saludable y productivo. Para lograrlo, las empresas pueden implementar diversas estrategias, como fomentar el crecimiento profesional, promover la variedad de tareas y proyectos, y reconocer regularmente el esfuerzo de los empleados. Estas acciones ayudan a reducir la sensación de inutilidad y monotonía, manteniendo la motivación y el compromiso.
La psicología del trabajo desempeña un papel clave en este proceso, ya que permite comprender cómo las dinámicas laborales afectan la salud mental de los empleados. A través del análisis de estos factores, se pueden diseñar políticas de bienestar más efectivas que reduzcan el impacto de la sisifemia y otros trastornos laborales.
En este sentido, la formación en recursos humanos y prevención de riesgos laborales, como la que ofrecen el Máster en Recursos Humanos en Madrid y el Máster en Recursos Humanos en Valencia de la Universidad Europea, es clave para enfrentar la sisifemia y otros desafíos del mundo laboral. Contar con profesionales capacitados en la materia permite a las empresas actuar de manera preventiva. Esto no solo mejora el bienestar y la satisfacción de los empleados, sino que también contribuye a la creación de un entorno laboral más saludable y productivo, y a la prosperidad de la empresa.