Objetivos de la promoción de la salud
En su búsqueda de una mejora, la promoción de la salud persigue varios objetivos:
- Aumento en las condiciones de vida y logro de la equidad: permitiendo que las personas (profesionales y pacientes) puedan disfrutar de las mismas condiciones independientemente de su posición.
- Mejora en la calidad de vida y disminuir riesgos: por ejemplo, proporcionando las mejores condiciones en materia de servicios, perfeccionando la resolución de problemas y la gestión de emociones del individuo, o creando entornos favorables para cada persona, independientemente de su edad, sexo, condición o etnia.
- Prevención y control de accidentes: consiste en proporcionar información y formación sobre medidas preventivas y así evitar los percances laborales o las contingencias en el hogar.
- Fomento de estrategias entre distintos sectores: esto puede lograrse creando entornos saludables y combatiendo la desigualdad en el acceso a la salud, entre otras cuestiones.
- Orientación del sector sanitario a resultados: algo que podemos obtener al evitar operaciones y pruebas diagnósticas innecesarias, realizar una asignación de recursos humanos adaptada a la demanda real o mejorar la eficiencia económica.
- Gestión del cambio: a través de nuevos procesos, herramientas y empleo de recursos humanos tanto a nivel institucional como de proyecto, podemos impulsar este cambio.
- Fomento de la toma de decisiones de la sociedad sobre su salud.
Por su parte, la OMS planteó cinco áreas de acción en su carta de Ottawa para la promoción de la salud (1985):
- Garantizar una política sanitaria preocupada por la salud.
- Crear medidas preventivas que puedan crear ciudades saludables.
- Fomentar la acción comunitaria para analizar problemas sanitarios y encontrar soluciones.
- Reorientar los servicios sanitarios para incluir en ellos la promoción de la salud.
- Promover una educación sanitaria en la población.
La educación para la salud, necesaria para ejercer una influencia positiva sobre su promoción, hace referencia a las prácticas que posibilitan el desarrollo de habilidades y conocimientos necesarios para que los ciudadanos mejoren su salud individual y colectiva.