La gestión y el ahorro energético son temas cruciales en el debate público actual. En el marco de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas, se busca duplicar la tasa mundial de mejora de la eficiencia energética para 2030. Este objetivo global resalta la importancia de adoptar prácticas sostenibles no solo a nivel gubernamental y social, sino también en el ámbito empresarial.
Para las empresas, la gestión energética y ambiental se ha convertido en una necesidad. No se trata únicamente de cumplir con las normativas internacionales, sino también de aprovechar esta oportunidad para reducir costes y mejorar la sostenibilidad corporativa implementando prácticas eficientes.
En este contexto, los profesionales capacitados en estas áreas estarán mejor preparados para liderar los cambios necesarios y adaptar las empresas a un entorno cada vez más regulado y competitivo. Por ello, en la Universidad Europea ofrecemos másteres que te aportarán los conocimientos y habilidades para sobresalir en este campo. Entre ellos, se encuentran el Máster en Gestión Ambiental, el Máster en Energías Renovables o el Máster en Sistemas Integrados de Gestión.
La gestión energética consiste en medidas planificadas para utilizar la energía de manera más eficiente. Su principal objetivo es optimizar la relación entre la cantidad de energía consumida y los bienes o servicios producidos.
Esta práctica busca reducir el consumo total de energía sin afectar la producción o actividad de la empresa. Además, ayuda a disminuir la huella de carbono y ecológica, y a proteger el medioambiente.
Un sistema de gestión energética (SGE) es un conjunto organizado de políticas, procesos y prácticas diseñado para gestionar el uso de la energía de manera eficiente en una empresa.
Este sistema se basa en el ciclo de mejora continua, que incluye identificar, planificar, ejecutar y evaluar medidas que para optimizar el consumo energético.
Los SGE ayudan a las empresas a:
Para certificar su SGE, muchas empresas adoptan la norma ISO 50001. Esta proporciona un marco reconocido internacionalmente para gestionar y mejorar el desempeño energético.
Implementar un sistema de gestión energética eficaz requiere una serie de pasos clave. Estos son:
Una auditoría energética ofrece una visión completa del consumo energético de la empresa. Recolecta datos históricos y analiza las características de las instalaciones para identificar áreas de mejora. En España, desde 2016, las grandes empresas deben realizar una auditoría energética cada cuatro años.
Es importante monitorizar el consumo energético en tiempo real. No basta con conocer el consumo global, es necesario identificar las áreas de mayor demanda energética para desarrollar medidas aplicables a corto, medio y largo plazo, sin afectar la productividad.
Cada empresa debe adaptar las estrategias de eficiencia energética a sus necesidades específicas. Algunas medidas comunes incluyen el uso de energías renovables, la mejora del aislamiento térmico y la utilización de residuos para generar energía. Es recomendable probar estas soluciones en un entorno controlado antes de una implementación completa.
Es crucial hacer seguimiento y comparar los resultados obtenidos con los objetivos iniciales. Esto permite verificar si las medidas están generando el ahorro esperado y ajustar las estrategias según sea necesario para descubrir nuevas áreas de mejora.
Instaurar un sistema de gestión energética tiene múltiples beneficios para las empresas. Algunos son:
Las empresas pueden apoyarse en diversas herramientas y tecnologías para mejorar la gestión energética como, por ejemplo:
Los programas de software de gestión energética permiten monitorizar y analizar el consumo de energía en tiempo real. Con estos sistemas, se puede obtener datos precisos sobre cómo se usa la energía, identificar áreas donde se puede ahorrar y aplicar mejoras de manera más eficiente.
Los sistemas de control y automatización, como los sistemas de gestión de edificios (BMS), ayudan a regular el consumo de energía de manera inteligente. Estos sistemas ajustan automáticamente la energía utilizada para la iluminación, climatización y otros aspectos según las necesidades y condiciones, lo que puede reducir el consumo significativamente.
Los sensores y medidores avanzados proporcionan datos detallados sobre el consumo energético en diferentes áreas de la empresa. Estos dispositivos permiten realizar un seguimiento continuo, identificar ineficiencias y evaluar el impacto de las medidas de ahorro implementadas.
Las herramientas de análisis de datos y la inteligencia artificial (IA) pueden procesar grandes cantidades de información sobre el uso de energía. Estas tecnologías ayudan a prever patrones de consumo, optimizar la gestión energética y sugerir estrategias para mejorar la eficiencia.
En la Escuela de Sostenibilidad de la Universidad Europea, puedes formarte en áreas clave como la energía verde, las tendencias actuales de la ecoeficiencia energética y el consumo sostenible. Ponemos a tu disposición carreras, másteres y cursos diseñados para prepararte para liderar estos (y otros) campos emergentes.
Descubre nuestras titulaciones:
¡Consulta nuestra oferta académica completa y encuentra la titulación que mejor se adapte a tus objetivos profesionales!