¿Qué es la logística de almacenamiento?

La logística de almacenamiento se encarga, principalmente, de la recepción, el almacenaje y el transporte de mercancías de un punto a otro. Aunque esta explicación pueda parecer sencilla, lo cierto es que se trata de una tarea compleja que requiere de conocimientos específicos que podrás adquirir con titulaciones como el Grado Superior en Comercio Internacional del Centro de Formación Profesional Europeo de Madrid – Estudios Profesionales Superiores, que también puede estudiarse en Valencia o a través de la modalidad online.

Acompáñanos por este recorrido en el que repasaremos los objetivos de esta actividad comercial y te explicaremos qué roles existen y puedes desempeñar dentro del mundo de la logística de almacenamiento.

Objetivos de la logística de almacenamiento

El principal propósito de la logística de almacenamiento es optimizar el proceso de recogida, provisión y envío de mercancías a través de una serie de funciones que deben ser ejecutadas con acierto. Entre estos cometidos, encontramos:

• El aprovisionamiento: para que la recepción tenga lugar en el momento estipulado, es necesario contar con una planificación que permita a los encargados estimar con anticipación si los productos que esperan llegarán en el plazo indicado y en la cantidad necesaria. Para evitar retrasos y fallos de aprovisionamiento, es recomendable realizar todas estas acciones con la anticipación necesaria.
• La simplicidad y la eficacia del almacén: es preciso contar con un depósito lo suficientemente grande y disponer de pleno control sobre el inventario de productos recibidos. Para ello, es primordial que el almacén esté organizado de tal forma que sea posible distribuir adecuada y ordenadamente los pedidos recibidos, garantizando que estén a la vista. Además, para lograr la eficacia del almacenaje es recomendable apoyarse en distintas herramientas tecnológicas que permiten llevar a cabo una logística elástica, automatizar los procesos y aplicar el big data e IoT en la gestión del inventario y la cadena de suministro.
• El diseño del almacén: se trata de buscar la máxima eficiencia posible, teniendo en cuenta tanto las necesidades actuales de almacenamiento como las futuras.
• El desplazamiento de la mercancía: es necesario conocer la distancia que va a recorrer cada producto, junto a los posibles puntos de control y las paradas que realizará a lo largo del trayecto.
• La seguridad: no solo debe garantizarse que el envío del producto se efectúe de forma segura, sino que también es preciso garantizar que las herramientas que puedan utilizar los empleados para manipular el artículo en cuestión sean fiables.

Beneficios de la logística de almacenamiento

Gestionar adecuadamente la logística de almacenamiento supone importantes efectos positivos en la relación de la oferta y la demanda, la centralización del espacio de almacenaje, el embalaje y envío, y la optimización del servicio al cliente. Exponemos estas ventajas a continuación:

• Al controlar el inventario será posible evitar efectos indeseados, como el retraso de pedidos y envíos por falta de existencias.
• Al contar con una localización principal se simplifican los procesos de recepción, almacenamiento y distribución de mercancías.
• Al disponer de los distintos materiales necesarios para empaquetar o envolver los productos, es posible agilizar el proceso de envío.
• Al mejorar los tiempos de envío, se logra que la percepción del cliente de la calidad del servicio mejore.

Salidas profesionales de los estudios de logística de almacenamiento

Son muchas las salidas profesionales a las que puedes optar si dispones de estudios especializados en logística de almacenamiento, como los señalados al principio de este artículo. Entre las más populares y demandadas en la actualidad, destacan:

• Asistente o adjunto de comercio internacional: revisa y controla el estado de las compras y las ventas al exterior.
• Agente de comercio internacional: media entre una empresa que quiere exportar alguno de sus productos y otra (de un país diferente) que quiere importarlos.
• Consignatario de buques: representa a las navieras en los puertos para la recepción y entrega de cargas.
• Operador logístico: diseña, gestiona y controla los procesos de la cadena de suministro.
• Técnico de logística del transporte: gestiona y organiza actividades relacionadas con la recepción, el almacenaje y el transporte de mercancías.
• Coordinador logístico: toma decisiones relacionadas con la logística o el departamento logístico de una empresa.
• Técnico en logística inversa: organiza y gestiona el retorno del flujo logístico de los productos frente a su nueva comercialización.

En la actualidad, y según datos del Instituto de Comercio Exterior (ICEX) el sector de la logística y el transporte mueve en España en torno al 7 % del PIB nacional. La calidad de las infraestructuras que atesora posiciona a nuestro país entre los más punteros a nivel mundial. Por ello, la logística de almacenamiento es y será un sector lleno de posibilidades. ¿Te animas a especializarte en este sector? Quizá te interese nuestro Máster en Lógistica de Canarias. Consulta toda nuestra oferta académica en nuestra web .