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Los concursos públicos son siempre una opción segura en momentos de incertidumbre económica. Aunque los proyectos para la Administración no sean siempre los más rentables y los pagos a veces se retrasen, lo cierto es que estos están siempre garantizados.
Ahora bien, presentarse a una licitación pública requiere habilidades avanzadas de planificación y gestión de proyectos. Las Administraciones públicas son muy rigurosas tanto en la fase de adjudicación como en la de ejecución. En algunos casos, exigen metodologías específicas de gestión de proyectos como el modelo BIM.
El Curso BIM en Gestión de Proyectos de la Universidad Europea explora en profundidad esta nueva metodología de gestión que coordina distintas tecnologías para mejorar la eficiencia de los proyectos. El programa cumple con los requisitos de formación para la certificación BIM Manager de la Agencia de Certificación Profesional. Se trata de una titulación muy demandada, ya que todas las licitaciones públicas de proyectos de edificación y obra civil del MITMA exigen la aplicación de BIM.
Una licitación pública es un procedimiento regulado por el cual un organismo público abre un concurso con el fin de contratar proveedores para la ejecución de una obra o la provisión de un suministro o servicio.
En este proceso, el organismo dependiente del Estado invita a diferentes agentes privados a formular propuestas con respecto a una base establecida. Posteriormente, la mesa de contratación selecciona la opción más ventajosa, en lo que se conoce como proceso de adjudicación.
Ahora que ya sabes qué es una licitación pública, tienes que saber cómo presentarte. Desde la entrada en vigor de la Ley de Contratos del Sector Público en 2018, la presentación de ofertas debe realizarse de manera telemática a través de un sistema de licitación electrónica habilitado por la Administración.
Existen algunas excepciones a la presentación electrónica de ofertas. Si ese es el caso, el tipo de presentación se detallará en el pliego de condiciones de la licitación.
Las presentaciones electrónicas se realizan a través de sobres electrónicos que garantizan la confidencialidad e integridad de las propuestas.
1.Estudiar atentamente los pliegos de condiciones de dicha licitación. Estos pliegos varían según el tipo de obra o servicios, e incluyen información sobre:
Aspectos técnicos:
Condiciones administrativas:
Condiciones económicas:
Según el tipo de licitación, la entidad solicitante puede ser una persona física o una persona jurídica (como una empresa o sociedad).
Para acreditar la identidad de una persona física es necesario contar con un DNI, y, en el caso de la jurídica, estar en posesión de la escritura de constitución de la sociedad inscrita en el Registro Mercantil.
Esta documentación deberá estar además debidamente compulsada.
Para considerar una oferta, los procesos de licitación pública exigen que se demuestre la solvencia económica y técnica de la entidad solicitante.
Para acreditar la solvencia económica es necesario presentar pruebas de que no existen deudas con la Agencia Tributaria ni con la Seguridad Social. Además, dependiendo del valor estimado del contrato de obras, se puede exigir información detallada sobre el volumen anual de negocio y el patrimonio neto del concursante.
La solvencia técnica es la garantía de que la entidad solicitante cuenta con capacidad para la ejecución del proyecto. Se puede acreditar demostrando experiencia en trabajos similares y presentando títulos académicos, certificados de colegiación y de calidad u otra documentación similar.
En muchos casos, esta es la parte más costosa de la presentación de un proyecto de licitación. Es una exposición detallada de cómo se llevará a cabo el proyecto de obra, suministro o servicios en caso de adjudicación. La calidad del proyecto técnico puede ser determinante para ganar el concurso. Por eso, programas como Máster BIM Management son de gran utilidad para presentar una documentación con un alto nivel técnico y una presentación excelente.
La oferta económica es un criterio clave de adjudicación. Para hacer una estimación correcta es necesario calcular lo más exactamente posible los costes y los beneficios para conocer la rentabilidad del proyecto. También es muy importante tener en cuenta las condiciones del mercado y la competencia ya que, en muchos casos, las ofertas ganadoras son las que tienen un coste más bajo.
Las licitaciones públicas son una excelente oportunidad para obtener credibilidad y visibilidad. Abren las puertas a nuevos clientes y permiten adquirir experiencia de cara a futuras licitaciones. Dada la actual inestabilidad económica, la competencia en estos procesos es cada vez mayor. Por ese motivo, es imprescindible poder presentar un proyecto que destaque.