La calidad asistencial dentro del área de la sanidad

Al pensar en la mejor manera de definir lo que es una asistencia sanitaria de calidad, la palabra que más resuena en la mente de las personas suele ser una: sanar. Pero hacerlo además de la mejor forma posible: con la efectividad y eficiencia que solo los mejores profesionales en el sector de la salud te pueden brindar.

Hoy en día, la calidad asistencial se ha convertido en una prioridad para los pacientes, que ahora son más demandantes con el sistema. Y no solo resulta una prioridad para ellos, también lo es para unos profesionales que cada vez están mejor formados con estudios específicos como un Máster online en Gestión Sanitaria y tecnologías médicas pioneras en innovación y efectividad.

Todo ello, unido a multitud de factores científicos y también sociales, ha influido en el hecho de que la calidad asistencial sanitaria se encuentre en un estado permanente de evolución y mejora. Pero ¿qué es realmente la calidad asistencial?

¿Qué es la calidad asistencial sanitaria?

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la calidad asistencial se puede definir de la siguiente forma:

“Una atención sanitaria de alta calidad es la que identifica las necesidades de salud (educativas, preventivas, protectoras y de mantenimiento) de los individuos o de la población de una forma total y precisa, y destina los recursos necesarios (humanos y de otros tipos) a estas necesidades de manera oportuna y tan efectiva como el resultado actual del conocimiento lo permite”.

En otras palabras, la calidad asistencial sanitaria se define como un tipo de asistencia médica eficaz dada por parte de cualquier profesional de la salud. Debe ser capaz de resolver los problemas de los pacientes con las mayores garantías posibles y a la vez, adecuarse a sus necesidades. Además, siguiendo el principio de efectividad y eficiencia, esta calidad asistencial debería de ocurrir en el menor tiempo posible y sin incidencias.

Estándares de calidad asistencial en el ámbito de la sanidad

Hoy en día, la OMS reconoce seis dimensiones básicas que todo profesional de la salud debería seguir para brindar la mejor calidad asistencial:

• Efectividad: se define en términos de alcance en función de que los servicios sanitarios prestados generen en los individuos los efectos deseados en un principio.
• Eficiencia: la eficiencia se logra cuando se consigue o bien maximizar, o bien minimizar el rendimiento de una inversión realizada en términos de relación entre el coste y resultado de esta.
• Acceso: hace referencia a la facilidad con la que es posible obtener un servicio sanitario, teniendo en cuenta varios factores como pueden ser el geográfico, el económico o el cultural, entre otros.
• Equidad: los servicios relativos a la calidad sanitaria se deben ofrecer a todos los pacientes de manera igualitaria sin hacer distinciones por su raza, género, etnia, localización geográfica o estatus socioeconómico.
• Seguridad: la calidad asistencial se debe proveer a todo paciente con la idea de minimizar todo riesgo actual o potencial de generar cualquier daño.
• Experiencia asistencial al paciente: para brindar una calidad asistencial óptima, se necesita que los servicios que se van a brindar estén en concordancia con los deseos y las preferencias de los individuos que van a recibirlos.

Objetivos para la mejora de la calidad asistencial

Existen diversos métodos y herramientas capaces de mejorar la calidad asistencial sanitaria proporcionada por los profesionales de la salud, todos ellos basados siempre en el objetivo de ofrecer a los pacientes la mejor atención y el mejor cuidado que se les pueda brindar.

Para ello, los profesionales sanitarios pueden apoyarse en guías prácticas clínicas que impulsen la calidad de su trabajo. También resulta de gran utilidad contar con diferentes sistemas de seguimiento (auditorías, estudios de pacientes o consentimientos informados, entre otros), o evaluaciones de homólogos que ayuden a evaluar, acreditar y, en el caso de que sea posible, también mejorar el trabajo del personal sanitario.

Según datos de la OMS, cada año se producen entre 5,7 a 8,4 millones de muertes en países con ingresos medios o bajos a causa de un sistema de calidad asistencial deficiente, lo que a menudo causa graves discusiones sobre la mejora y la reforma a la hora de diseñar las claves de las políticas sanitarias de cada país.

La sociedad actual, cada vez más informada, está empezando a ser más exigente con el trato que se da al individuo, y espera que surja de la mano de profesionales sanitarios que estén más preparados y capacitados para prestar los mejores servicios a los pacientes.

Por ello, cada vez son más demandados los estudios en áreas sanitarias como el Máster en Gestión Sanitaria en Madrid de la Universidad Europea, o bien, cualquiera de nuestros otros masters de Salud y Biomédicas. Estos estudios ofrecen la formación y acreditación necesarias para formar a expertos en el área de la calidad asistencial sanitaria dispuestos a lograr un sistema sanitario verdaderamente eficiente y equilibrado.