Trastornos de la PICA: como diagnosticarlos y tratarlos

La pica es un trastorno alimentario que se caracteriza por el consumo persistente de sustancias que no son alimentos. Este comportamiento puede provocar serios problemas de salud, desde intoxicaciones y infecciones hasta complicaciones en el sistema digestivo.

Abordar el trastorno de pica necesita un trabajo conjunto de diferentes profesionales, ya que las causas pueden ser tanto físicas como emocionales o sociales. No existe una única forma de tratarlo, por lo que psicólogos, médicos y otros especialistas colaboran para diseñar un plan de intervención adaptado a cada persona.

Para conseguirlo, los profesionales sanitarios necesitan una formación especializada, por lo que si quieres dedicarte al sector de la salud ayudando a personas con esta enfermedad y otras puedes estudiar el Máster en Trastornos de la Conducta Alimentaria Madrid, el Máster en Trastornos Alimentarios y Obesidad en Málaga o el Máster en TCA online dónde te formarás en diagnóstico, tratamiento e investigación de trastornos como la obesidad, la anorexia, la bulimia nerviosa, el trastorno por atracón y otros menos conocidos.

¿Qué es pica?

La pica es un trastorno de la conducta alimentaria (TCA) que puede afectar gravemente la salud física y mental de los afectados. Entender qué es un TCA y sus tipos será clave para un diagnóstico precoz y un tratamiento efectivo.

La enfermedad pica se caracteriza por el consumo de sustancias no nutritivas y no alimenticias. Estas sustancias pueden incluir tierra, tiza, papel, cabello o hielo.

Este comportamiento va más allá de un interés ocasional en probar cosas nuevas. Para ser clasificado como trastorno debe producirse de forma persistente durante al menos un mes.

Las personas que lo sufren tienen un nivel de desarrollo suficiente como para saber que estas sustancias no son comestibles. Además, no padecen otro trastorno mental ni otra condición médica que lo provoque. Tampoco entrarían en la definición del trastorno las prácticas culturales que aceptan la ingestión de estas sustancias.

Causas del síndrome PICA

El desarrollo de la pica puede estar influenciado por una combinación de factores biológicos, psicológicos, sociales y ambientales.

• Edad: aunque puede ocurrir a cualquier edad, es más común en niños y mujeres embarazadas.
• Deficiencias nutricionales: las deficiencias de hierro, zinc y otros nutrientes esenciales están fuertemente asociadas a la pica. Estas deficiencias pueden desencadenar antojos de sustancias no nutritivas.
• Trastornos del desarrollo y conducta: aunque no se produce como consecuencia de otro trastorno, sí que es más frecuente en personas con discapacidad intelectual y con trastornos obsesivo-compulsivos o del espectro autista. Parece estar relacionada con la necesidad de estimulación sensorial o con comportamientos repetitivos y restrictivos.
• Factores psicológicos: el estrés, el abuso infantil, el abandono y otras experiencias traumáticas pueden contribuir a su desarrollo. En estos casos, la pica sirve como mecanismo de afrontamiento.
• Condiciones médicas: las mujeres embarazadas son más tendentes a desarrollar pica a consecuencia de los cambios hormonales. También las personas con trastornos gastrointestinales, celiaquía, enfermedad inflamatoria intestinal, y anemia
• Ambiente social y familiar: un entorno familiar disfuncional, la falta de supervisión, y la negligencia pueden aumentar el riesgo de pica. Un ambiente estresante o poco estimulante puede llevar a comportamientos de búsqueda de sensaciones.

¿Cómo se manifiesta la enfermedad PICA?

Las manifestaciones clínicas varían ampliamente dependiendo de las sustancias ingeridas. Las personas con pica pueden presentar los siguientes síntomas y complicaciones:

Problemas de salud física

• Problemas digestivos como dolor abdominal, náuseas, vómitos, estreñimiento o diarrea.
• Desgaste dental y lesiones en la boca debido a la masticación de sustancias duras.
• Fatiga y debilidad como consecuencia de una deficiencia nutricional. La pica puede ser tanto causa como consecuencia de deficiencias de nutrientes esenciales, especialmente hierro y zinc.
• Obstrucción intestinal, impactación fecal y perforaciones en el esófago, estómago o intestinos.
• Intoxicación por plomo y envenenamiento químico.
• Infecciones parasitarias y bacterianas.

Impacto psicológico y social

• Estigmatización y aislamiento social debido al comportamiento inusual.
• Agravamiento de problemas de salud mental existentes y desarrollo de nuevos problemas psicológicos como consecuencia del estrés provocado.

Tratamientos aplicados al síndrome PICA

El tratamiento de la pica suele requerir un enfoque multidisciplinario que aborde los aspectos tanto físicos como psicológicos del trastorno. Esto puede incluir:

• Terapia cognitivo-conductual: para modificar los comportamientos y pensamientos relacionados con la ingestión de sustancias no alimenticias.
• Suplementos nutricionales: en casos donde se identifican deficiencias de nutrientes específicos.
• Intervenciones médicas: para tratar cualquier daño físico causado por la ingestión de sustancias nocivas.
• Educación y apoyo familiar: para proporcionar un entorno de apoyo y comprensión que facilite el cambio de comportamiento.

La colaboración entre profesionales de la salud y el entorno del paciente es esencial para que el tratamiento tenga éxito.

La formación en trastornos de la conducta alimentaria (TCA) es crucial para abordar la pica de manera efectiva. Dado que la pica es un trastorno complejo, los profesionales de la salud necesitan una formación integral y especializada.

Una formación multidisciplinar les permitirá ofrecer un diagnóstico preciso y una intervención temprana. Estos dos factores son clave para mejorar la calidad de vida de los pacientes y para prevenir complicaciones.

Conocer los diferentes tipos de TCA, como la anorexia nerviosa, el trastorno por atracón o la ortorexia, también ayuda a detectar síntomas comunes y a centrar el diagnóstico.