La calidad asistencial es uno de los principales retos de las instituciones sanitarias, ya sean grandes clínicas o pequeñas consultas privadas. Sin embargo, para satisfacer las necesidades de los pacientes no basta con la profesionalidad y la calidad técnica, es vital conocer sus problemas, preferencias y expectativas. Por esa razón, el marketing sanitario está ganando cada vez más protagonismo en el sector de la salud.
El marketing en el sector de la salud se enfoca en determinar la mejor estrategia para proporcionar a los pacientes unos cuidados satisfactorios. Parte de la identificación de las necesidades, preferencias y expectativas de los pacientes para diseñar una atención sanitaria a medida que sea sostenible a largo plazo y tenga unos costes aceptables.
El plan de marketing es una herramienta imprescindible para todas las empresas que operan en el sector sanitario. Es un instrumento de gestión que recoge de manera detallada, ordenada y fácilmente comprensible las estrategias de marketing en salud y las correspondientes acciones que se deben realizar para alcanzar los objetivos deseados.
La primera fase del plan de marketing en el sector de la salud es investigativa. Debes recopilar la mayor cantidad de información posible sobre el perfil de tus pacientes potenciales para que puedas comprender quiénes son. Así podrás formarte una imagen del paciente prototípico en el que enfocarás tus acciones de marketing sanitario.
También es importante que investigues la competencia. Valora su oferta de servicios y la calidad de los mismos. Amplía tu mirada y analiza el mercado en la búsqueda de nuevas tendencias que te permitan predecir futuras demandas.
En base a esa información podrás identificar tus puntos fuertes y débiles, así como detectar las oportunidades y amenazas. También comprenderás qué te diferencia de la competencia y clarificarás tu propuesta de valor. Así podrás desarrollar servicios y productos que realmente satisfagan a tus pacientes.
En esta fase debes determinar los objetivos de marketing de tu clínica o centro de salud. Esos objetivos deben ser específicos, medibles, alcanzables, realistas y delimitados en el tiempo. Serán la brújula que te oriente para establecer una estrategia de productos, precios, comunicación y distribución, si es el caso. Por ejemplo, puedes apostar por el liderazgo en costes, especializarte en determinados tratamientos médicos o diferenciarte en los servicios.
Esas estrategias de marketing en salud deben concretarse en acciones específicas, que pueden ser desde publicar un blog que sirva para informar a los pacientes potenciales y te convierta en un referente en tu sector hasta potenciar el SEO local a través de anuncios en Google Ads o en medios locales.
También tendrás que asignar los recursos para llevar a cabo esas estrategias. Puedes contratar a un profesional del marketing en el sector de la salud o externalizar ese servicio, pero en cualquier caso tendrás que destinar una partida presupuestaria. Por tanto, debes decidir cuánto puedes gastar en tus acciones de marketing sanitario.
La última fase del plan de marketing sanitario implica diseñar sistemas de control que te permitan dar seguimiento a las acciones realizadas para evaluar su impacto y determinar si es necesario introducir correcciones que te brinden mejores resultados.
Para valorar los resultados de las acciones de marketing sanitario debes establecer indicadores clave de rendimiento (KPI). Estas métricas sintetizan la información sobre la eficacia y productividad de las acciones de marketing para que puedas tomar mejores decisiones. En el marketing sanitario, por ejemplo, puedes usar KPI’s como: número de consultas diarias, nuevos pacientes, costo de adquisición del paciente y/o satisfacción del paciente.
Por último, es importante que tengas en cuenta que las campañas de marketing en salud están muy reguladas. Es necesario cumplir el Código de Buenas Prácticas de Farmaindustria y conocer las leyes que regulan la publicidad de medicamentos y productos sanitarios para no incurrir en sanciones. Por eso, es importante especializarse con programas como nuestro Experto en Marketing Sanitario, con el que podrás dominar las técnicas de marketing sanitario, diseñar campañas de comunicación y, por supuesto, conocer los aspectos legales del ámbito de la salud.