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Mucha gente no tiene muy ubicada la profesión del terapeuta ocupacional. Es más, los hay que piensan que estos especialistas se dedican únicamente a entretener a personas que tienen alguna limitación física, cognitiva y/o conductual. Sin embargo, su labor va mucho más allá.
Con este artículo nos gustaría aclarar las dudas más comunes en torno a qué es la terapia ocupacional, la figura del terapeuta ocupacional y su profesión.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define la terapia ocupacional como:
“El conjunto de técnicas, métodos y actuaciones que, a través de actividades aplicadas con fines terapéuticos, previene la enfermedad y mantiene la salud, favorece la restauración de la función, suple las deficiencias incapacitantes y valora los supuestos del comportamiento y su significación profunda para conseguir las mayores independencia y reinserción posibles del individuo en todos sus aspectos: laboral, mental, físico y social.”
Dicho de otra manera, un terapeuta ocupacional es un profesional sociosanitario que, además de formar parte de equipos interdisciplinares, trata de mejorar la salud y el bienestar de cualquier persona con una enfermedad, lesión, discapacidad o en riesgo de exclusión social que limite o incapacite su participación en actividades de la vida diaria (AVD).
Para conseguir esto, este profesional hace una evaluación inicial con tal de conocer el estado del paciente. Y, una vez detectadas las necesidades, le proporciona un tratamiento personalizado basado en procedimientos terapéuticos que, según las circunstancias, servirá para estimular funciones físicas, psíquicas y sensoriales, potenciar habilidades o fomentar el (re)aprendizaje de tareas.
En cualquier caso, el objetivo principal es lograr que el paciente desarrolle autonomía personal en su rutina diaria, al mismo tiempo que su calidad de vida aumenta.
El terapeuta ocupacional acostumbra a valorar, prevenir y actuar sobre pacientes sin importar su edad, clase o condición. Su área de actuación no se limita a una única, sino que puede abarcar varias.
A continuación, nos centramos en los ámbitos que consideramos que son los más comunes:
Este campo de la terapia ocupacional se encarga de tratar a pacientes que sufren enfermedades o trastornos mentales.
Entre los más habituales, se encuentran: la esquizofrenia, los trastornos del estado de ánimo, los trastornos de la personalidad y los trastornos del comportamiento alimentario (TCA).
Los profesionales especializados en este ámbito de actuación se ocupan de aquellas personas que presentan dificultades de movimiento en una o varias partes del cuerpo, defectos de postura, falta de coordinación o trastornos del equilibrio.
Estos problemas pueden deberse a una alteración en los músculos, los huesos o las articulaciones; o bien, ser consecuencia de algún daño cerebral que afecta a las habilidades motoras.
Algunos terapeutas ocupacionales se dedican a ayudar a personas mayores, especialmente a aquellas que padecen patologías físicas y /o mentales derivadas del envejecimiento.
El día a día de estos profesionales va enfocado a mantener activos e integrados en el entorno social a estos pacientes, ralentizar el avance de sus enfermedades y aportarles calidad de vida e independencia en la medida de lo posible.
Este tipo de terapia ocupacional está orientada a asistir a niños y adolescentes con una o varias destrezas alteradas (o que carece de alguna de ellas) debido a una enfermedad, un trauma físico o psicológico, una disfunción, una situación de pobreza, etc.
A través de actividades y procedimientos terapéuticos, se intentan abordar estas limitaciones para que no vayan a más, a la vez que se estimula el desarrollo cognitivo, psicomotor y social.
La terapia ocupacional también se encarga de contribuir a la recuperación de personas que han sufrido alguna lesión psicológica o física grave mediante el entrenamiento y la readaptación de aquellas capacidades susceptibles de mejora. Siempre siguiendo las pautas más adecuadas para la situación de cada paciente.
La terapia ocupacional es una profesión sociosanitaria reconocida en España por la Ley 44/2003, de 21 de noviembre, de ordenación de las profesiones sanitarias y a la que podrás acceder a través del Grado en Terapia Ocupacional Semipresencial de la Universidad Europea.
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