Estudiar criminología: ¿qué se estudia en criminología?

La criminología es mucho más que el estudio de los delitos. También, es una disciplina multidimensional que explora el comportamiento humano desde perspectivas legales, sociales y psicológicas.

Para quienes sienten una vocación por la justicia y desean contribuir a la seguridad y el bienestar social, estudiar el Grado en Criminología online de la Universidad Europea ofrece una trayectoria académica y profesional apasionante.

En este artículo, desglosaremos qué se estudia en criminología, las habilidades que se adquieren durante la carrera universitaria, y las diversas salidas profesionales disponibles para estos graduados.

¿Qué es la criminología?

La criminología se define como la ciencia que estudia los delitos, sus causas, los delincuentes y las respuestas sociales, legales y preventivas frente al comportamiento criminal. 

Es un campo que integra conocimientos de varias disciplinas para analizar la naturaleza del crimen y proponer las mejores efectivas, entre las que se encuentran: el derecho, la psicología, la sociología y las ciencias forenses.

Hoy en día, la criminología también aborda temas emergentes como la cibercriminalidad, la delincuencia organizada y la justicia restaurativa, reflejando así su adaptabilidad a los cambios sociales y tecnológicos.

¿Qué se estudia en Criminología?

El plan de estudios del Grado en Criminología de la Universidad Europea (también, disponible en nuestro campus de Valencia) está diseñado para ofrecer una visión completa y profunda del fenómeno delictivo. A continuación, detallamos algunos de los principales temas y asignaturas que forman parte del currículo:

• Teorías criminológicas: los estudiantes comienzan su formación con una base sólida en teorías que explican el comportamiento delictivo, abarcando desde el enfoque clásico hasta teorías contemporáneas como el labelling, la teoría del control social y los estudios de criminología crítica. Estas asignaturas permiten comprender los factores biológicos, psicológicos y sociales que influyen en la conducta criminal.
• Psicología criminal: en esta área, los futuros criminólogos analizan cómo los procesos mentales y los trastornos psicológicos pueden predisponer a la conducta delictiva. Se estudian perfiles criminales, patrones de comportamiento y la psicopatología de los delincuentes, proporcionando herramientas para la evaluación y tratamiento de los infractores.
• Derecho y procedimiento penales: un conocimiento profundo del marco legal es muy importante en criminología. Los estudiantes aprenden sobre la tipificación de delitos, los derechos de los acusados, los procedimientos judiciales y las sanciones penales. Este bloque formativo se complementa con asignaturas sobre derecho penitenciario y los derechos humanos en el contexto penal.
• Metodología de la investigación y ciencias forenses: las técnicas de investigación son cruciales en la labor de un criminólogo. Los estudiantes adquieren habilidades en la recolección y análisis de pruebas, reconstrucción de escenas del crimen y uso de tecnologías como la balística, la toxicología y la genética forense. También se enfatiza la importancia de la cadena de custodia y la ética en la investigación criminal.
• Prevención del delito y políticas de seguridad: esta área se centra en el diseño y evaluación de políticas públicas destinadas a la prevención del delito y la reducción de la reincidencia. Se estudian programas de intervención, estrategias de seguridad ciudadana, y la efectividad de medidas legislativas y comunitarias. Los estudiantes también analizan la influencia de factores sociales como la pobreza, la educación y la desigualdad en la delincuencia.

Habilidades que desarrolla un criminólogo

Más allá del conocimiento teórico, estudiar criminología desarrolla habilidades prácticas y competencias que son valoradas en el ámbito profesional. Estas son:

• Análisis crítico y pensamiento estratégico: los criminólogos deben saber interpretar datos complejos, identificar patrones y tendencias, y proponer soluciones basadas en evidencia científica. Esta habilidad es útil para la elaboración de perfiles criminales y la evaluación de riesgos.
• Investigación y metodología científica: la capacidad para diseñar y realizar investigaciones rigurosas es fundamental. Esto comprende la recolección y análisis de datos cualitativos y cuantitativos, la realización de encuestas y entrevistas, y la elaboración de informes detallados. Estas habilidades son aplicables en roles de investigación tanto en el sector público como privado.
• Comunicación eficaz y trabajo en equipo: los criminólogos suelen trabajar en equipos multidisciplinarios que incluyen abogados, psicólogos y expertos forenses. Comunicar hallazgos de manera clara y persuasiva, tanto de forma oral como escrita, es esencial para colaborar eficazmente y para presentar resultados ante audiencias no especializadas.
• Ética profesional y sensibilidad social: el trabajo en criminología implica encara dilemas éticos y tratar con situaciones sensibles. La formación cuenta con una fuerte base en ética profesional para asegurar que los graduados actúen con integridad y respeten los derechos de todos los involucrados, desde las víctimas hasta los acusados.

¿Por qué estudiar criminología?

Optar por estudiar criminología es elegir una carrera que combina la pasión por la justicia con el deseo de comprender y mejorar la sociedad.

Este campo no solo ofrece una comprensión exhaustiva de las causas y consecuencias del crimen, sino que también permite a los profesionales involucrarse en la creación de soluciones innovadoras para problemas complejos. 

Además, la formación en criminología desarrolla habilidades transferibles que son altamente valoradas en múltiples sectores, desde la seguridad hasta la investigación académica.

La importancia de la formación continua en criminología

En un entorno en constante cambio, la formación continua es esencial para los criminólogos. Los avances en tecnología, como las aplicaciones de la inteligencia artificial y el análisis de big data, están transformando la forma en que se investigan y previenen los delitos. Por ello, la especialización a través de masters relacionados con Criminología permite a los profesionales estar al día en las últimas tendencias y herramientas del sector, al mismo tiempo que amplían sus competencias y mejoran sus perspectivas de carrera.

En definitiva, la criminología es un campo dinámico y en crecimiento que ofrece a los estudiantes la oportunidad de marcar una diferencia real en la sociedad. Con una formación sólida y un compromiso con la mejora continua, los criminólogos pueden aspirar a puestos de trabajo influyentes en la prevención del delito, la administración de justicia y la formulación de políticas públicas. Si estás interesado en una carrera que combina la investigación, la justicia y el servicio a la comunidad, estudiar criminología podría ser el camino ideal para ti.