Diferencia entre cirugía oral y maxilofacial

La cirugía oral y maxilofacial se ocupan del tratamiento de las patologías que afectan la boca, la cara y el cuello, así como de las estructuras craneofaciales. Sin embargo, aunque estos términos se suelen utilizar indistintamente, existen ciertas diferencias entre la cirugía oral y la maxilofacial que conviene conocer. Si te interesa estudiar odontología, es importante que entiendas que las diferencias afectan también a la trayectoria formativa a seguir en cada caso.

Cirugía oral y maxilofacial: ¿qué es y en qué se diferencian?

La cirugía oral se considera una especialidad de la odontología que se enfoca en el diagnóstico, prevención y tratamiento de las patologías que afectan el sistema bucal. En cambio, la cirugía maxilofacial es una especialidad médico-quirúrgica que se centra en el diagnóstico y tratamiento de las enfermedades y alteraciones del complejo maxilar y las estructuras adyacentes.

Por ende, la principal diferencia entre la cirugía oral y maxilofacial radica en su campo de acción. La cirugía maxilofacial no se limita a la cavidad bucal, sino que abarca otras patologías más complejas relacionadas con el tejido de la boca y la cara que pueden requerir un compromiso quirúrgico mayor, tienen un abordaje más complicado y/o demandan una rehabilitación más larga.

Como resultado, el trayecto formativo de ambos profesionales también es diferente. Para especializarse en cirugía oral, el odontólogo tendrá que cursar un programa especializado cuya duración oscila entre los 1 o 2 años. Para especializarse en cirugía maxilofacial es necesario contar con el título de Medicina y luego especializarse con una residencia hospitalaria de 5 años.

Las principales técnicas de la cirugía oral y maxilofacial

Algunos de los métodos y técnicas más empleados por los odontólogos especializados en cirugía oral son:

• Extracción dental. Generalmente de piezas dañadas, aquellas que no han presentado una mejora con otros tratamientos más conservadores o las que no encajan en la cavidad bucal, como las muelas del juicio.
• Frenectomía. Este procedimiento consiste en eliminar quirúrgicamente la banda de tejido fibroso y muscular que se encuentra entre los labios y la encía o debajo de la lengua, para lograr que esa estructura recupere la movilidad normal y mejorar el funcionamiento de la boca.
• Fenestración dental. La fenestración es un procedimiento mediante el cual se levanta un colgajo, se retira el hueso que cubre la corona del diente impactado y se realiza una pequeña ventana para colocar un accesorio sobre la pieza que sirva para activar la tracción ortodóncica y lograr que el diente ocupe el sitio adecuado en el arco dental.

En contraposición, algunos de los problemas y técnicas quirúrgicas más comunes en el día a día de los especialistas en cirugía maxilofacial son:

• Reparación de traumatismos maxilares. Los traumas faciales representan uno de los problemas de salud más importantes en todo el mundo, sobre todo debido a su elevada prevalencia, diversidad etiológica y alta morbilidad. El cirujano maxilofacial interviene en estos casos para fijar los huesos en las posiciones correctas y evitar en la medida de lo posible las considerables alteraciones funcionales y estéticas que pueden producirse en estos casos.
• Extirpación de quistes maxilares. Los quistes maxilares son lesiones benignas, normalmente con forma de bolsa, recubiertas por un epitelio. Sin embargo, en ocasiones, pueden destruir el hueso y provocar movimiento dentario, por lo que se recomienda su extirpación. Debido a su ubicación y tamaño, el cirujano maxilofacial es el profesional más adecuado para eliminar esos quistes.
• Cirugía ortognática. Este tipo de cirugía se realiza para colocar correctamente el maxilar y/o la mandíbula con el objetivo de lograr una adecuada oclusión y estética facial, facilitando además la masticación, respiración y lenguaje del paciente.
• Colocación de implantes dentales. La colocación de implantes dentales es relativamente sencilla, pero existen casos que demandan la intervención de un maxilofacial, como cuando hay que manipular estructuras óseas sensibles o se van a colocar múltiples implantes.

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Para finalizar, si quieres conocer más información, en este post podrás consultar por qué estudiar odontología, y cuáles son las principales razones por las que te recomendamos formarte en esta especialidad.