Un certificado de sostenibilidad es un documento que avala, de manera oficial, el cumplimiento de estándares para reducir el impacto ambiental, promocionar acciones sostenibles y garantizar la responsabilidad medioambiental de entidades, procesos y productos.
En un contexto de crisis climática, tomar conciencia del impacto ambiental se ha vuelto casi una obligación. Por eso, los certificados de sostenibilidad son una herramienta para empresas e instituciones que quieren demostrar su compromiso por un mundo más verde.
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Para las organizaciones, una certificación sostenible funciona como un sello identificativo de aprobación. No solo mejora la imagen de la empresa, sino que demuestra su compromiso con la reducción del impacto ecológico y las prácticas contaminantes.
En España, una de las principales entidades de certificación es la Asociación Española de Normalización y Certificación (AENOR), que gestiona certificaciones ISO, como la Certificación de calidad ISO 9001 o la Certificación ISO 14001 de sistemas de gestión ambiental.
Además, cada sector cuenta con sus propios certificados de sostenibilidad. Las empresas energéticas y de construcción, por ejemplo, pueden optar a certificados como el ISO 50001 y el LEED, que son los dos sellos más reconocidos a nivel de eficiencia energética. En el sector forestal, se aplican los certificados PEFC y FSC que garantizan la gestión sostenible de bosques y la trazabilidad de productos.
Otra certificación que se utiliza en España es el Fairtrade Ibérica, que garantiza la producción de comercio justo. También hay certificados de sostenibilidad específicos del sector turístico, como la UNE-EN ISO 18513:2022, el Certificado de Hoteles Ecológicos Sostenibles (HES) o el sello Biosphere, entre otros.
Para obtener un certificado de sostenibilidad, es necesario cumplir con una serie de requisitos que demuestren la adherencia a buenas prácticas ambientales. Las condiciones y el proceso para la obtención del certificado de sostenibilidad varían entre una entidad certificadora y otra.
En general, se tienen en cuenta aspectos como la gestión de residuos, la huella de carbono o la eficiencia energética. Además, muchas de estas certificaciones van más allá y evalúan también la sostenibilidad de los proveedores y otras partes de la cadena de suministro.
A nivel interno, las personas encargadas de obtener las certificaciones y presentar la documentación correspondiente son los técnicos de sostenibilidad o de ESG, según como esté estructurada la organización. A nivel externo, las entidades certificadoras tienen sus propios técnicos especializados en la evaluación de factores medioambientales y de impacto que verifican el cumplimiento de las exigencias de la certificación.
La obtención de certificados no es obligatoria, aunque a menudo sí que es recomendable y, en algunos sectores, suele traducirse en beneficios reales para las empresas.
La creciente sensibilización en temas medioambientales ha aumentado la demanda de profesionales centrados en la sostenibilidad ambiental. Con la formación y los conocimientos técnicos adecuados, los especialistas en este campo pueden acceder a múltiples salidas profesionales.
A esta profesión se puede acceder con un Grado en Medio Ambiente, pero esta no es la única formación posible. También son muy útiles todos los grados relacionados con la biología, la ecología, la ingeniería ambiental o la gestión de recursos naturales.
Pero, además, muchos graduados deciden ampliar su formación con programas de máster o posgrado como el Máster en Sostenibilidad o el Máster en Gestión Ambiental de la Universidad Europea. Este tipo de especializaciones ofrece conocimientos técnicos avanzados en temas como las políticas y normativas ambientales, la gestión de recursos o las evaluaciones de impacto.
Los especialistas en sostenibilidad ambiental tienen acceso a posiciones muy distintas en todo tipo de sectores. En el ámbito privado, pueden trabajar como técnicos u ocupar puestos de más responsabilidad en ESG y gestión de la sostenibilidad en las empresas.
También pueden trabajar en consultoras medioambientales en la realización de estudios de impacto, gestión de certificaciones y asesoramiento en temas medioambientales.
Por su parte, el sector público requiere cada vez más expertos en este campo dado el creciente número de exigencias normativas cuyo cumplimiento debe supervisarse.
Por último, para las personas con una vocación más social, el campo de las ONG también ofrece numerosas oportunidades laborales para quienes quieren proteger el medioambiente.