En el mundo actual, gracias a la intensificación de la comunicación y a las nuevas tecnologías, se están consolidando los procesos de interdependencia entre países y ciudadanos que dieron lugar a finales del S.XX a la Globalización. Estos procesos han hecho que se unan los mercados, las sociedades, el comercio y las empresas, y han provocado una serie de transformaciones sociales, económicas y políticas que conforman la realidad en la que vivimos.
Por eso necesitamos profesionales del Derecho que entiendan y conozcan bien el funcionamiento de la globalización y que estén técnica y competencialmente capacitados para poder dar un servicio de asesoramiento jurídico a sus clientes en entornos plenamente internacionalizados, en los que es imprescindible conocer distintos ordenamientos jurídicos.
Los abogados del mundo actual, en especial los abogados que asesoran a empresas necesitan tener una visión global de los negocios, que trasciende el conocimiento de la legislación nacional. Las empresas ya no desarrollan su actividad dentro de un único país. Se relacionan con otras empresas y entidades públicas y privadas en distintas partes del mundo, ya sea como proveedores, o como distribuidores, o en cualquier punto de su cadena de valor. Nuestra obligación como formadores es ofrecer a los estudiantes todas las herramientas que necesitan para afrontar con éxito este trabajo. Hoy día, para cualquier abogado de negocios, es imprescindible conocer la realidad multi-jurisdiccional y los distintos ordenamientos jurídicos aplicables en las prácticas económicas, financieras o comerciales.
Deben conocer cómo funciona la contratación internacional, cómo se activan los mecanismos de reclamación y defensa, cómo se regulan fiscalmente las transacciones comerciales internacionales, o cómo se establece responsabilidad jurídica en la confluencia de diferentes sistemas jurídicos. Debemos conocer la práctica internacionalmente aceptada, más allá de la legislación de un país determinado. Este conocimiento determina definitivamente la evolución profesional del abogado de nuestros días.
Hay distintas escuelas de derecho que ofrecen esta formación. Sin embargo, no todas ellas ofrecen una verdadera perspectiva internacional, porque son escuelas muy tradicionales, que llevan muchos años enseñando derecho en España, desde una perspectiva nacional, y porque no disponen del claustro altamente especializado que se necesita para impartir este tipo de enseñanza. El Derecho Internacional de los Negocios debe aportar al abogado una perspectiva internacional eminentemente práctica porque es un entorno muy cambiante y porque las actividades internacionales de las empresas están sufriendo una evolución vertiginosa. Por eso este tipo de formación requiere un verdadero entorno internacional de enseñanza, que permita mezclar las distintas perspectivas desde el inicio y a lo largo de todo el estudio de especialización, con profesionales que estén ya trabajando en estos negocios internacionales, y que estén acostumbrados a los cambios y a la adopción de soluciones rápidas a sus problemas.
Nosotros sí ofrecemos esta perspectiva internacional desde nuestros estudios de grado. Somos una Universidad internacional, y contamos con más del 60% de alumnos internacionales en nuestros campus, de todas partes del mundo. Ofrecemos un verdadero entorno internacional de enseñanza, y eso implica también al profesorado y a los servicios de atención al estudiante. Esto es, precisamente, lo que nos avala como expertos en formación multicultural y en entornos internacionales.
Además, como parte de la Red, nosotros somos verdaderamente una empresa multinacional, y estamos acostumbrados a gestionar procesos, contratos, transacciones, y relaciones internacionales con el resto de nuestros socios. No solo enseñamos lo que hay que hacer, sino que hacemos lo que enseñamos.
Por otro lado, la enseñanza de especialización en derecho debe ser eminentemente práctica primero, porque el Derecho en la actualidad está sometido a muchos cambios y segundo porque las nuevas tecnologías ayudan a sustituir el estudio memorístico de antaño, por un estudio más aplicado, más enfocado a resolver problemas y más crítico y reflexivo. Esto es así para cualquier área, pero especialmente para el derecho de los negocios internacionales. Por eso este tipo de formación requiere un claustro complejo con profesionales en ejercicio, y con expertos en negocios internacionales. En la Escuela de Abogados de la UEM contamos con estos profesionales gracias a la colaboración de abogados de despachos especializados en esta área profesional como DLA, GA-P, Clyde, o BDO…. Y gracias a la asociación con el despacho Cremades y Calvo Sotelo, co-fundador de la Escuela de Abogados.
Así mismo, la metodología docente que aplicamos basada en el modelo Challenge Based Learning, y que aplicamos en la enseñanza del derecho y en la enseñanza del resto de las Ciencias Sociales, es la idónea para este tipo de formación práctica y aplicada. Porque no se trata del método del caso, en el que el alumno utiliza casos fenecidos en los que el profesor sabe la respuesta adecuada porque ya han sido resueltos con anterioridad por los tribunales, y condiciona el pensamiento del alumno. Sino que utiliza casos reales, en supuestos aun no resueltos, en los que cabe aplicar el pensamiento crítico y la búsqueda abierta de soluciones, a partir de las herramientas jurídicas de las que disponemos. El alumno se convierte así en el protagonista de su propio aprendizaje, y puede construir una identidad propia, un “copyright” de su capacidad jurídica y de su capacidad creativa para resolver los retos a los que se enfrenta. Las competencias y habilidades en las que el alumno se entrena con este tipo de metodología son justamente las que necesita todo buen abogado de negocios y todo buen especialista en Derecho de los negocios internacionales.
Como expertos en la formación de abogados, sabemos el crecimiento en la demanda de profesionales en derecho de los negocios internacionales que en este momento reclama el mercado profesional. Una especialización en esta área es la que se está requiriendo en los grandes despachos, en las consultoras internacionales, y en los departamentos in house y asesorías jurídicas de empresas multinacionales, en las áreas de negocios de mayor crecimiento y de mayor nivel de internacionalización como la industria de la energía, las telecomunicaciones, el sector audiovisual o el comercio en internet.
El Máster en Derecho Internacional de los Negocios combina materias de la especialización en derecho mercantil, con materias económicas y de gestión empresarial internacional. Aporta los conocimientos necesarios para poder asesorar en operaciones empresariales internacionales de gran envergadura como procesos de fusiones y adquisiciones, o de más modesto impacto como la apertura de nuevos negocios on line, o el asesoramiento a start ups a través de e-commerce. Los estudiantes van a adquirir el conocimiento básico de la estructura legal del sistema del Common Law y del comercio internacional, lo que complementará su visión más local y continental del Derecho. Además conocerán el marco legal aplicable a los contratos y acuerdos comerciales multinacionales, al contrato para la venta internacional de bienes y servicios, el régimen legal de la transferencia del riesgo (Incoterms), a los contratos de distribución, agencia, franquicia y diferentes formas corporativas, etc. El curso también introducirá a los estudiantes en el sistema arbitraje y mediación o conciliación, en el derecho de daños y en tributación internacional; en derecho de la competencia y en la ordenación de los sectores regulados, en derecho de la insolvencia internacional y en derecho bancario y de seguros.
Todos estos conocimientos permitirán que el estudiante conozca y entienda los contratos comerciales, los métodos y límites de la negociación, la definición de las obligaciones de las partes, y por supuesto la resolución de conflictos.
Es muy importante que los abogados del futuro sean conscientes de la importancia que para las empresas en la economía moderna tienen las cuestiones legales y las cuestiones éticas relacionadas con el desarrollo de los negocios. Por ello, nuestro programa incluye la formación en las herramientas jurídicas esenciales desde la perspectiva de la sostenibilidad y la honestidad. Nuestros alumnos deben ser capaces de reconocer los potenciales problemas legales y riesgos reputacionales en relación con las acciones comerciales internacionales de sus clientes, y deben ser capaces de desarrollar las habilidades necesarias para hacer un proyecto legal completo, ético y honesto de asesoramiento jurídico de calidad conectado con el plan de negocio. Por ello, se les ofrece la posibilidad de adquirir de forma complementaria, una formación sustancial en compliance y en derecho penal de la empresa, muy útil a la hora de establecer límites a la actividad empresarial.
Además, nuestro máster permite la especialización jurídica en 4 áreas de alta empleabilidad: asesoría jurídica internacional de empresas, asesoría penal de empresas, sector de las telecomunicaciones y sector de la energía.
Está dirigido a aquellos licenciados o graduados en Derecho que deseen adquirir los conocimientos técnicos y las habilidades necesarias para el ejercicio de la profesión de abogado de empresa en entornos internacionales. Pero también a Graduados a Ingenieros, graduados en ADE, profesionales del mundo de la empresa (especialmente para aquellos que trabajan en los sectores de la energía, las telecomunicaciones o el sector audiovisual) que quieran ampliar sus conocimientos jurídicos para poder desarrollar mejores transacciones comerciales internacionales.
El programa, que se desarrollará en castellano y en inglés, abordará los principios del Derecho Anglosajón y su interacción con el Derecho Continental, los principios de contratación internacional y aspectos más específicos como el Derecho de la Competencia, el Derecho Financiero, o el Derecho Fiscal Internacional, y las vías de resolución internacional de conflictos
La abogacía, el ejercicio profesional de las profesiones jurídicas esta cambiando profunda y rápidamente, porque el Derecho esta también cambiando y adaptándose a una sociedad globalizada en la que se comparte mucho mas intensamente que en cualquier ora época anterior, la sociedad, la cultura, el comercio, los bienes y servicios, etc.
Los abogados que tengan clara vocación mercantil, deben prestar un servicio de asesoría jurídica global porque el mundo de los negocios se ha globalizado. Por eso, los abogados del futuro deben ser técnicamente excelentes en el conocimiento de los principales sistemas jurídicos del mundo, y de los sistemas internacionales que determinan el funcionamiento de las relaciones económicas y comerciales en la globalización.
Pero también deben manejar con soltura las herramientas informáticas y las nuevas tecnologías, y deben complementar sus estudios con conocimientos esenciales sobre el negocio, sobre la lógica empresarial, sobre la filosofía de la multiculturalidad que sostiene la interpretación de las normas en entornos complejos, etc.
Dra. Ana María Ovejero Puente
Vicedecana de Derecho y Ciencias Políticas
Universidad Europea de Madrid