Psicopatología: ¿qué es y qué tipos de trastornos psicopatológicos existen?

La psicopatología es una rama de la psicología que analiza las enfermedades o trastornos mentales, cuál es su origen, su curso y su posible evolución. Concretamente, se centra en estudiar los comportamientos anormales de las personas, los describe, los clasifica y ofrece pautas para prevenirlos o tratarlos.

Cuando hablamos de psicopatología o de trastornos mentales, nos estamos refiriendo a un conjunto extremadamente amplio de problemas relacionados con la conducta, el pensamiento y las emociones que, por lo general, no tienen una causa física directa (como sí ocurre con las enfermedades médicas) o con síntomas psicológicos.

¿Cuáles son los trastornos mentales más comunes?

Según múltiples estudios sobre los problemas psicológicos en todo el mundo, existen seis grandes categorías, o tipos, de trastornos mentales:

• Trastornos de ansiedad: este tipo de trastornos relacionados con la ansiedad incluyen el trastorno de ansiedad generalizada, que se caracteriza por una preocupación excesiva por problemas del día a día, pero también por el trastorno de angustia, la agorafobia y la ansiedad social (fobia social).
• Trastornos del estado de ánimo: cuando se habla de trastornos del estado de ánimo, se hace referencia a problemas psicológicos con síntomas de depresión o manía,. Esto es, con un grado de euforia que resulta poco funcional para la vida cotidiana y que supone un riesgo muy grande para la persona que lo padece. No obstante, son mucho más comunes los síntomas depresivos que los episodios de manía.
• Abuso y dependencia de sustancias: aunque es cierto que existen muchas sustancias cuyo consumo conlleva un riesgo de adicción alto (cocaína, heroína, etc.), la adicción al alcohol es el más común de este tipo de trastornos mentales, llevando a resultados tan graves como el síndrome de Wernicke-Korsakoff o la demencia alcohólica.
• Trastornos del control de impulsos: esta categoría es muy ambigua y recoge diferentes tipos de problemas mentales. El ejemplo clásico es el del trastorno explosivo intermitente, que está caracterizado por momentos de repentina agresividad física y/o verbal.
• Esquizofrenia y otros tipos de psicosis: la psicosis se define como un trastorno mental en el que se produce una pérdida de contacto con la realidad. Más en concreto, los trastornos del espectro psicótico se diagnostican a partir de síntomas y signos de delirio, alucinaciones, lenguaje desorganizado, apatía generalizada y falta de coherencia en las respuestas emocionales.
• Trastornos de la personalidad: los trastornos de la personalidad son un tipo de problema psicológico más o menos habitual, pero que no es demasiado conocido fuera del mundo de los especialistas. Consisten en patrones de comportamiento, pensamiento y emoción desadaptativos y crónicos. Normalmente, se presentan desde el inicio de la vida adulta y duran toda la vida en mayor o menor grado, ya que conforman la estructura mental básica del individuo.

Aportaciones de la neuropsicología al estudio de la psicopatología

Gracias a las aportaciones de la neuropsicología, el campo de la psicopatología ha podido avanzar significativamente en los últimos años y décadas. La neuropsicología estudia la relación entre el cerebro y la conducta y se encarga de hacer diagnósticos que permitan conocer las carencias cognitivas de la persona y cómo estas pueden afectar a su vida diaria.

La principal contribución de la neuropsicología al campo de la psicopatología es que proporciona datos objetivos sobre los déficits cognitivos que están relacionados con los trastornos mentales, y cómo estos déficits afectan a la vida del paciente. De este modo, las pruebas clínicas que aporta la neuropsicología sirven para intentar establecer las bases cerebrales de los diferentes trastornos psicopatológicos. Dicho de un modo muy resumido, la neuropsicología es la parte empírica de la psicología, la fuente de la que esta se nutre con datos objetivos y científicos del cerebro del paciente que sufre algún tipo de trastorno psicológico.
Una buena forma de poder seguir formándote y conociendo en este tema es cursar nuestro Máster en Neuropsicología Clínica. En él, podrás entender con mucha mayor profundidad en qué consisten los diferentes tipos de trastornos mentales y qué relación guardan con los mecanismos del cerebro y con la conducta de la persona.