

El compostaje se ha convertido en una de las prácticas más eficaces y sostenibles para reducir el impacto ambiental y gestionar los residuos orgánicos. Este proceso, que a veces también se denomina con la voz inglesa composting, no solo beneficia al medioambiente, sino que también fomenta la economía circular, una estrategia clave para el desarrollo sostenible.
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¿Qué es el compost?
El compost es un fertilizante orgánico y natural obtenido mediante la descomposición de materia orgánica procedente de restos vegetales o comida entre otros. El resultado final es un producto similar a la tierra, y su función principal es enriquecer el suelo, mejorando su estructura para retener agua y nutrientes. Es así como se promueve el crecimiento vegetal de una forma más saludable en la agricultura, jardinería o huertos.
Tipos de compost
Hay diferentes tipos de compost, se pueden clasificar según el método o los materiales utilizados.
Tipos de compost por escala
- Compostaje doméstico: tipo de compostaje que se realiza en los hogares, se usan compostadoras o pilas de compost.
- Compostaje comunitario: es un compostaje realizado en jardines o huertos urbanos.
- Compostaje industrial: tipo de compost a gran escala, es decir, existen unas instalaciones específicas para tratar grandes cantidades de residuos.
Tipos de compost por método
- Compostaje tradicional: es el más común, consiste en la descomposición de residuos orgánicos usando microorganismos en condiciones aeróbicas, es decir, con oxígeno.
- Vermicompostaje: utilizan lombrices para el proceso de descomposición. Se utiliza una vermicompostadora, que es un recipiente cerrado, donde las lombrices procesan los restos orgánicos y los transformarlos en vermicompost.
- Compostaje Bokhasi: es un proceso que utiliza microorganismos anaeróbicos, es decir, sin oxígeno para descomponer los residuos.
- Compostaje en tambor: este tipo de compost emplea un tambor giratorio en caliente para mezclar y airear los residuos.
- Compostaje en pilas: los residuos se colocan en montones al aire libre, volteándose periódicamente para asegurar su composición.
- Compostaje en frío: es un tipo de compostaje más lento que tarda varios meses, pero es el más sencillo.
Tipos de compost por materiales
- Compostaje de residuos verdes: en este tipo de compost se incluyen restos de verduras, hojas frescas y frutas entre otros.
- Compostaje de residuos marrones: emplean hojas secas, ramas, papel o cartón.
- Compostaje con estiércol: utiliza residuos de estiércol animal como materia prima.
- Compostaje con residuos específicos: se utilizan residuos concretos como, por ejemplo, los restos de las producciones cafeteras.
Cómo hacer compost casero
A continuación, indicamos los pasos con los que se puede realizar compost casero, reduciendo residuos.
- Encuentra un espacio adecuado: puede ser un rincón del jardín, el patio o incluso el balcón o la terraza si vives en un piso.
- Separa tus residuos orgánicos: incluye pieles de frutas y verduras, restos de poda, posos de café y hojas secas. Evita los productos animales, ya que pueden atraer plagas.
- Mezcla materiales verdes y marrones: los materiales verdes contienen más cantidad de agua y aportan nitrógeno y humedad, mientras que los marrones son residuos secos, como ramas y hojas muertas, que generan carbono y evitan el apelmazamiento. La proporción adecuada es de dos partes de materiales marrones por cada parte de verdes.
- Controla la humedad y la ventilación: remueve la mezcla cada dos semanas para garantizar que reciba suficiente oxígeno. Si está demasiado seca, añade agua; si está muy húmeda, incorpora más materiales marrones.
- Espera entre tres y seis meses: dependiendo de las condiciones ambientales, tu compost estará listo cuando tenga un color oscuro, olor a tierra y una textura uniforme.
¿Qué es el compostaje?
El compostaje es el proceso natural que transforma los residuos orgánicos en compost, un abono que enriquece el suelo. Este proceso ocurre gracias a la acción de microorganismos como bacterias y hongos, así como de pequeños invertebrados, como lombrices, que descomponen la materia orgánica en un ambiente controlado.
Este método es clave en la lucha contra el cambio climático, ya que reduce la cantidad de residuos que llegan a los vertederos y contribuye a minimizar las emisiones de metano, un potente gas de efecto invernadero. Además, el compost permite fertilizar el suelo sin necesidad de usar productos químicos que puedan contaminar el agua y el aire.
Fases del compostaje
El compostaje no consiste simplemente en enterrar residuos orgánicos: es un proceso estructurado que implica varias etapas. Si se siguen correctamente, se garantiza un compost de alta calidad y beneficioso para el medioambiente. Estas son las fases principales:
- Recolección de residuos: los materiales orgánicos como cáscaras de frutas, restos de verduras, posos de café, hojas secas y recortes de césped se seleccionan cuidadosamente.
- Preparación de la mezcla: los residuos verdes (ricos en nitrógeno) y los marrones (ricos en carbono) se combinan en una proporción equilibrada para asegurar una descomposición efectiva.
- Descomposición activa: en esta etapa, los microorganismos descomponen la materia orgánica. La temperatura puede aumentar considerablemente, lo que ayuda a eliminar agentes patógenos.
- Maduración: el compost se deja reposar durante varias semanas o meses para que se estabilice. Al final, se obtiene un material homogéneo y oscuro, listo para ser utilizado.
Beneficios del compostaje
El compostaje tiene un impacto positivo en el medioambiente, la sociedad y la economía. Una de sus principales ventajas es la reducción de los residuos agrícolas, ya que ayuda a minimizar el impacto ambiental asociado a su eliminación mediante métodos tradicionales, como la quema o el vertido.
Además, el compostaje contribuye significativamente a la disminución de emisiones de gases de efecto invernadero al evitar que los residuos orgánicos terminen en vertederos. También mejora la fertilidad del suelo y aumenta su capacidad para retener nutrientes y agua sin tener que recurrir a fertilizantes químicos. Por último, el compostaje es un pilar fundamental de la economía circular, ya que convierte los desechos en recursos útiles y contribuye directamente a la reducción de la huella de carbono.
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Artículo publicado el 4 de Diciembre de 2024