Aprendizaje inmersivo: llega una nueva era al mundo educativo

¿Te imaginas visitando el Museo de Historia Natural de Londres o explorando el universo con tus alumnos sin moveros del aula? ¿Y enseñarles a hacer una reanimación cardiopulmonar sin que peligre la vida de nadie, por supuesto? Esto y mucho más es posible ahora gracias al aprendizaje inmersivo.

Hoy te contamos en qué consiste esta innovadora metodología por la que están apostando muchos maestros y profesores. En especial, aquellos que huyen de “lo tradicional” y andan en busca de nuevas experiencias y recursos que ayuden a sus alumnos a desarrollar su potencial de cara a los retos que les están por venir.

¿Qué es el aprendizaje inmersivo?

El aprendizaje inmersivo es una técnica que se basa principalmente en el uso de nuevas tecnologías como, por ejemplo, la realidad aumentada, la realidad virtual o el vídeo 360 grados. A través de ellas, el estudiante tiene la oportunidad de explorar un entorno virtual e interactuar con los contenidos igual que lo haría en el mundo real.

El hecho de ofrecer al estudiante la oportunidad de involucrarse a todos los niveles (visual, mental y físico) en diferentes escenarios contribuye a aumentar su motivación, además de una mejor asimilación y retención de la información por su parte. Porque como dijo Confucio: “Me lo contaron y lo olvidé; lo vi y lo entendí; lo hice y lo aprendí”.

¿Es lo mismo aprendizaje inmersivo y aprendizaje experiencial?

De primeras, y sobre todo si no estás del todo familiarizado, puede parecerte que ambos conceptos son lo mismo. Sin embargo, existen ciertos matices que los hace diferentes. Para que resulte más clarificador, hemos recopilado las principales diferencias entre aprendizaje inmersivo y aprendizaje experiencial en la tabla que encontrarás de seguido:

¿Qué tecnologías se usan para el aprendizaje inmersivo?

Entre las principales tecnologías inmersivas que actualmente se usan en el ámbito educativo y formativo, se encuentran:

• Realidad virtual (VR): permite crear escenarios 100 % digitales, totalmente desvinculados de la realidad que vemos y percibimos. A ella se accede a través de un dispositivo, normalmente unas gafas, que aísla al usuario de su entorno físico.
• Realidad aumentada (AR): está compuesta por capas de información u objetos que se superponen al mundo físico en el que vivimos y se visualizan a través de la pantalla de un móvil o tableta.
• Realidad mixta (MR): esta se caracteriza por generar un entorno 3D de la realidad al que se le añade información virtual. A diferencia de las 2 tecnologías inmersivas anteriores, el usuario sí puede interactuar con los objetos o personas de esta realidad híbrida.
• Vídeo inmersivo o de 360 grados: es una grabación que incluye imágenes panorámicas rodadas al mismo tiempo y desde todas las direcciones gracias a un equipo de múltiples cámaras o una cámara omnidireccional. El usuario no puede influir en el entorno o la acción.

Ventajas del aprendizaje inmersivo

Como ya hemos dicho, cada vez son más los docentes que apuestan por la metodología del aprendizaje inmersivo a la hora de impartir sus clases, independientemente del nivel educativo y la asignatura. Ahora bien, ¿cuáles son sus razones?

• Tiene un enfoque lúdico que se traduce en unos mayores niveles de motivación y compromiso de los estudiantes con su aprendizaje.
• Permite que el alumnado aprenda habilidades que necesitará en su día a día , ya sea personal o profesional, y las ponga en práctica sin estar sometido a estrés .
• Ofrece la oportunidad de visitar lugares o vivir experiencias inaccesibles en circunstancias normales , ya sea por su lejanía en tiempo o espacio, peligrosidad, extinción o porque están en proceso de descubrimiento.
• Es capaz de despertar la curiosidad y autonomía de los estudiantes.
• Descubre perspectivas nuevas o puntos de vista diferentes al alumnado dándole acceso a un conocimiento más profundo de ciertos temas.

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