Los resultados de este trabajo pueden aportar información valiosa para el diseño de futuras estrategias de manejo de conflictos entre el ser humano y la vida salvaje.
Los doctores Álvaro Luna (coordinador del Grado de Medio ambiente y Sostenibilidad) y Bruno D. Suárez de Tangil han publicado en la revista PlosOne el artículo “Social perception of mesocarnivores within hunting areas differs from actual species abundance”.
Analizar las similitudes entre la percepción social y la información ecológica tomada en campo podría ayudar a identificar sesgos potenciales en la identificación y gestión de conflictos entre el ser humano y la vida salvaje. En este trabajo, los investigadores han analizado el grado de similitud entre la abundancia relativa percibida por cazadores y otros lugareños y la abundancia relativa medida en campo para revelar si la actitud hacia los carnívoros está fundamentada o si, por el contrario, está sesgada por otros factores.
Sus resultados indicaron que, en general, la abundancia relativa percibida fue diferente a la recogida a través del trabajo de campo. Estos investigadores también hallaron que la abundancia percibida y el daño atribuido a especies de caza menor estaba relacionada con la habilidad de los entrevistados para identificar a las especies de carnívoros. Por tanto, en este trabajo se destaca la existencia de sesgos y la necesidad de aumentar el conocimiento de las personas sobre la distribución y ecología de las especies antes de tomar decisiones cuando se trata de gestionar conflictos entre el ser humano y la vida salvaje, especialmente en aquellos colectivos que se ven directamente involucrados.
“Consideramos que el principal valor que tiene este trabajo es que aúna y analiza información que tradicionalmente se recoge por separado. Por un lado, mide la distribución y abundancia de especies que en determinadas localizaciones llegan a generar conflictos y, por otro lado, analiza la percepción social que tienen dichas especies para el público general, y para colectivos involucrados en conflictos con la vida salvaje en particular”, según Bruno Suárez de Tangil”.
Los resultados de este trabajo pueden aportar información valiosa para el diseño de futuras estrategias de manejo de conflictos entre el ser humano y la vida salvaje, dado que describen tres aspectos interesantes que pueden pasar desapercibidos si la percepción social y la evidencia objetiva registrada a través de datos de campo son consideradas de manera independiente: disparidades entre la abundancia relativa percibida y real, sesgos en la percepción social derivados de un escaso conocimiento sobre las especies y la voluntad, generalmente positiva, de armonizar la caza con la conservación de la naturaleza.