“El reto es la combinación de presencial y digital, y una apuesta clara por un aprendizaje de gran calidad, que cada vez será más profundo y personalizado” (…) “La Universidad Europea ha tomado conciencia en estos meses de lo que somos capaces de hacer, y de cómo todas las transformaciones a las que estamos asistiendo, representan una oportunidad para desarrollar nuevas estrategias. Y aunque la pandemia haya dado un vuelco al sistema educativo, la enseñanza presencial en ningún caso será sustituida por la virtual”. Es el análisis que realizó la rectora de la Universidad Europea de Madrid y directora académica de España y Portugal, Elena Gazapo, en el quinto programa #CompromisoUE, al que estaban convocados, como siempre, todos los profesionales que trabajan en los campus de Madrid, Valencia y Canarias.
El exrector de la Universidad de Lleida Roberto Fernández, que presidió la CRUE entre los años 2017 y 2019, y que en la actualidad se sienta en el Consejo Asesor Universitario Nacional de la Universidad Europea, opinó que “como decía San Ignacio, en tiempos convulsos no es aconsejable hacer mudanzas y sería un error que los cambios que ha habido que acometer por razones de urgencia, ahora se conviertan en estructura” (…) “Conviene no confundir modernidad con modernez”, sentenció, en línea con la tesis que defendió el economista Juan Antonio Vázquez, expresidente de la Conferencia de Rectores, igual que él, y miembro también del Consejo Asesor de la Universidad Europea. “Se educa por contagio”, afirmó. “La educación es un proceso que lleva a la formación de ciudadanos libres y preparados como profesionales y como personas. Por ello, la relación de los alumnos con los profesores y sus compañeros, es fundamental. La universidad no es un sitio al que ir; la universidad no debe convertirse en un sitio web”. Y añadió el que fuera presidente de la Universidad de Oviedo hasta 2008: “En esta crisis provocada por el COVID-19 se ha puesto de manifiesto una preocupante falta de liderazgo a la hora de abordar lo que había que hacer con el sector educativo. Destacaba un columnista en la prensa que se habla mucho más de lo que hay que hacer para que la gente vaya a la playa, que de los planes para las universidades. Es algo que denota que el país no va bien”.
Más allá de la dicotomía presencial-virtual, Elena Gazapo enumeró tres claves sobre el modelo que empieza a vislumbrarse “como dice siempre Miguel Carmelo, presidente y CEO de la Universidad Europea, todo pivotará en torno a la capacidad de innovación, el talento y el capital para acometer las inversiones necesarias. En ese tablero de juego competimos universidades públicas y privadas, y por el lado del capital, especialmente las privadas”. Ni Roberto Fernández ni Juan Antonio Vázquez quisieron entrar en el eterno debate “¿universidad pública o privada?” Ambos se mostraron de acuerdo en que “la titularidad pública es lo de menos; lo que hay son buenas y malas universidades”. El primero reivindicó con rotundidad el papel de los profesores: “Cuidar su selección resulta imprescindible. Se discute mucho sobre el modelo de docencia y muy poco sobre el modelo de profesor que necesitamos, cuando ellos son la sal y la tierra de la universidad”.