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Todo dispositivo electrónico está formado por dos tipos de componentes interdependientes: el hardware y el software. La diferencia entre el hardware y el software es la base desde la que parte cualquier formación en administración de sistemas informáticos. Si estás interesado en estudiar una titulación relacionada con este campo, el DAW - Grado Superior en Desarrollo de Aplicaciones Web de la Universidad Europea cuenta con programa universitario, con versión online, donde busca formar a profesionales cualificados en programación, configuración de sistemas informáticos y desarrollo web.
La primera diferencia entre hardware y software se encuentra en su definición. Por un lado, el hardware de un ordenador es el conjunto de componentes físicos que permiten el funcionamiento de un dispositivo electrónico. Es decir, es la parte tangible de un sistema informático. Según su función, estos componentes pueden ser:
Por otro lado, el software es el conjunto de programas, aplicaciones y datos que permiten a un ordenador realizar tareas específicas. A diferencia del hardware, el software es intangible, ya que son códigos e instrucciones que el hardware ejecuta. Estas instrucciones se clasifican en tres tipos:
Si comparamos estos dos elementos con el sistema humano, podríamos decir que el hardware es nuestro cuerpo y el software es el cerebro, que es quien da las instrucciones para ejecutar acciones como moverse o respirar.
Más allá de su función y uso, las diferencias entre hardware y software afectan a características como su coste, duración, mantenimiento y vulnerabilidad.
El hardware generalmente tiene un coste inicial más elevado, especialmente si se trata de equipos de alto rendimiento. En cambio, el software puede ser incluso gratuito si se trata de software libre. Sin embargo, las licencias de programas especializados pueden ser bastante costosas y tienen que renovarse cada cierto tiempo, con lo que hay un coste de mantenimiento.
El hardware puede desgastarse o deteriorarse con el tiempo, ya que está sujeto a condiciones físicas como el calor, la humedad o el uso constante. El software, en cambio, no se desgasta físicamente, pero puede quedar obsoleto o tener errores.
El hardware requiere mantenimiento físico, como limpieza o reemplazo de componentes defectuosos. Esto es más costoso porque implica reemplazar componentes físicos. El software, en cambio, se mantiene mediante actualizaciones, corrección de errores o parches de seguridad, lo que es más sencillo y económico.
El hardware no es vulnerable a los ataques de seguridad, pero el software tiene vulnerabilidades que lo hacen susceptible a ciberataques, virus y otros problemas de seguridad.
Como hemos visto a lo largo del artículo, el hardware y el software se necesitan mutuamente para funcionar.
El software le indica al hardware qué hacer y cómo hacerlo, gestionando todas las operaciones necesarias, desde el arranque del sistema hasta la puesta en marcha de aplicaciones complejas. Los componentes físicos, como la CPU, la memoria, el disco duro o el teclado, necesitan instrucciones para ejecutarse, es decir, para realizar tareas como abrir un archivo o hacer una impresión. Y estas instrucciones las proporciona el software.
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