Realizar ejercicio físico en entornos naturales cada vez tiene más interés para la población por motivos de ocio, salud, entretenimiento o competición. La espeleología es una actividad recreativa que consiste en la exploración de cuevas subterráneas naturales, la cual ha atraído a un número creciente de participantes en los últimos años, pero existe poca información sobre las demandas fisiológicas y psicológicas de esta actividad al aire libre. Puede variar desde simples caminatas guiadas hasta desafiantes recorridos durante semanas o incluso meses en entornos exigentes y estresantes que combinan la oscuridad, espacios claustrofóbicos y condiciones húmedas y resbaladizas.
Hasta donde se sabe, ningún estudio previo había examinado la respuesta ansiogénica autónoma en actividades de espeleología reales. Esta falta de conocimiento sobre la respuesta orgánica en este contexto aumenta potencialmente los riesgos que enfrentan los participantes.
Vicente Javier Clemente Suárez, profesor en la Facultad de Ciencias del Deporte y miembro del Grupo de Investigación en Psicofisiología Aplicada de la Universidad Europea, junto con los investigadores José Francisco Tornero Aguilera, Joaquín Sánchez Molina y Valentín E. Fernández-Elías, ha analizado recientemente la respuesta psicofisiológica de espeleólogos novatos en una ruta de espeleología. El artículo ha sido publicado en la revista Wilderness & Environmental Medicine bajo el título “Psychophysiological Stress Response of Novice Cavers in a Speleology Route”. En total, se han analizado las modificaciones en la modulación autónoma y en el esfuerzo y estrés percibido en 18 participantes físicamente activos antes, durante y después de una ruta de espeleología de 3 horas de duración con diferentes maniobras de actuación.
Entre las principales conclusiones, cabe destacar la respuesta de ansiedad anticipatoria en los participantes antes de comenzar la ruta, así como aumentos significativos en las calificaciones de esfuerzo, percepción de estrés, síntomas de fatiga, angustia y en la frecuencia cardíaca durante la exploración como resultado de la sobreestimulación producida por la actividad. Esta fuerte respuesta al estrés puede afectar negativamente en la toma de decisiones y en diferentes aspectos de la memoria, algo que puede derivar en malas acciones que pueden poner en peligro la integridad física individual o grupal.