Los países occidentales han estudiado en numerosas ocasiones el desarrollo del talento deportivo tomando como sujetos a atletas canadienses, suecos, españoles, británicos o estadounidenses. Pero, sin embargo, los deportistas de la cultura oriental siguen siendo un campo inexplorado.
China no sólo destaca por su gran evolución socioeconómica, sino que en las últimas décadas se ha convertido en un país con gran potencial deportivo y cifras como 546 medallas que atesora en su Historia Olímpica lo avalan. De esta forma, el país llegará a los Juegos Olímpicos de verano de Tokio 2021 como los séptimos más altos ganando medallas, éxito que no parece repetirse en uno de los deportes más practicados a nivel mundial como es el baloncesto donde han conseguido tres medallas olímpicas y dos podios en campeonatos del mundo en toda su historia, todo ello en la categoría femenina.
Para analizar los factores clave que influyen en las carreras de jugadores de baloncesto de élite chinos, un grupo de investigadores formado por José Bonal, profesor de la Facultad de Ciencias del Deporte de la Universidad Europea, junto con Sergio Jiménez, de la Universidad Rey Juan Carlos; y Alberto Lorenzo, de la Universidad Politécnica, ha realizado una entrevista a 11 jugadores chinos de alto nivel semiestructurada en diferentes categorías como contexto social, contexto deportivo, factores tácticos o factores antropométricos. Bajo el título “The Talent Development Pathway for Elite Basketball. Players in China” el artículo ha sido publicado en la International Journal of Environmental Research and Public Health con el objetivo de comprender qué hechos les han ayudado a lograr el más alto nivel deportivo a través de la investigación cuantitativa y cualitativa.
Entre los principales resultados obtenidos de esta entrevista, centrada en el itinerario vital de los deportistas, destaca el factor cultural y su influencia en las diferentes dimensiones que afectan al desarrollo del talento de este deporte en China. Un ejemplo de ello se puede ver en el contexto social, donde la "tradición familiar", profundamente arraigada y valorada en la cultura china, es un elemento con alta influencia en los jugadores, tanto a la hora de elegir el baloncesto como dedicación como elemento motivador para superar las dificultades a lo largo de su carrera. El concepto de tradición familiar es la principal motivación para llegar a la élite para muchos de los sujetos.
Además, en este contexto, los jugadores de élite chinos valoran negativamente el abandono de sus estudios académicos en edades tempranas, entre los 13 y 14 años, para la dedicación exclusiva al baloncesto, siendo la educación y sus efectos positivos en el desarrollo, uno de los factores más valorados por los entrevistados.