“Profesora de día y escritora de poemas de noche”, así se describe Gleyvis Coro, autora de Mujer, aparta de mí ese smartphone. Entre los versos de su poemario más reciente podemos recrear la ruptura de un matrimonio que tiene como único escenario y “gatillo” el último modelo de Smartphone disponible. “Es un poemario muy a tono con la realidad emocional en tiempos de coronavirus, donde los vínculos son más virtuales que presenciales”, comenta Gley. “Los poemas están escritos desde dos enfoques fundamentales y opuestos: el enfoque de ella, la esposa, a favor de las nuevas tecnologías; y el enfoque del esposo, que se opone a las mismas. Es una literatura que se expresa con los códigos de su tiempo, una poesía con emoticonos y, sobre todo, un libro sobre el amor y su cuidado”, añade la escritora.
La faceta de poetisa nació al mismo tiempo que lo hizo Gley: “Trabajar (o más bien jugar) con la poesía es, para mí, una vocación de vida. Creo que vino en el paquete genético. Para casi lo único que fui precoz fue para eso. Juntar palabras, crear pensamiento y construir imágenes con los versos”.
Cuando era joven, en paralelo con sus estudios de Odontología, Gley se formó de un modo más profesional en un Centro de Formación y Creación Literaria de La Habana, capital de Cuba, donde nació. Allí se reunían jóvenes talentos de toda la isla para entrenar en técnicas de construcción literaria y ella no podía faltar. Siempre estuvo vinculada a los grupos literarios de su provincia y país, pero ser escritora no ha sido el único sueño que ha cumplido. “La literatura ha sido una escuela permanente para mí. Le debo mi educación sentimental y social, mi equilibrio mental y también, acaso, mi profesión más querida: ser profesora”. Actualmente es profesora y coordinadora de Simulación Clínica en Odontología en la Universidad Europea.
Cien días en cuarentena (poemas sobre el coronavirus) es otra de sus obras recién salidas del horno de la imprenta, un libro de poesía popular escrito de modo exprés para la gente común, que persigue la máxima comunicación con el lector y busca su compañía, muy necesaria en estos tiempos de Covid. “Es un libro ameno y de muy buen humor, que abraza, consuela y hará reír al lector”, describe la autora.
“La poesía es el alma de todo, la evidencia clarísima de que todo tiene alma; la mejor explicación de la vida y su justificación más completa. En definitiva, la poesía es agua de vida que se regala”, termina diciendo Gley Coro, profesora y poetisa a partes iguales.