Este es el segundo año que se desarrolla el proyecto Institutos Digitales, una iniciativa con importante impacto en el día a día de los estudiantes de diversos centros de educación de secundaria de España y Portugal.
La Fundación Universidad Europea continúa colaborando con diversos centros de educación de secundaria para reducir la brecha educativa, social y tecnológica, acrecentada por la pandemia de la covid-19. Este es el segundo año que se desarrolla el proyecto Institutos Digitales, una iniciativa con importante impacto en el día a día de los estudiantes, puesto que “las pizarras digitales y el acompañamiento al claustro en materia de incorporación efectiva de las tecnologías promueve la alineación con el plan de digitalización de centros, la competencia digital del alumnado y del profesorado, favorece el uso del campus virtual y que el alumnado pueda seguir las clases desde casa”.
Hasta el momento, la Fundación Universidad Europea ha ayudado a varios colegios de España (IES Vallecas Magerit, en Madrid; e IES Julio Verne, en Toledo) y en Portugal (Agrupamento de Escolas do Bairro Padre Cruz, en Lisboa). En palabras de Sonia Martínez Requejo, coordinadora de este proyecto, “ya hemos donado 10 paneles interactivos o pizarras digitales para aulas de ESO y bachillerato, y estamos trabajando con el profesorado de forma coordinada con los planes de digitalización de centros que se exige de cara al curso que viene”.
En este sentido, destaca que “el proyecto está teniendo una gran acogida en los centros. Avanzamos despacio, debido sobre todo a la falta de tiempo y el exceso de trabajo de los docentes en los institutos, pero poco a poco vamos superando las limitaciones”. Junto a Sonia Martinez, en este proyecto también participan Sonia Escorial, responsable de la Unidad de Atención a la Diversidad; David Lozada, responsable de TIC; y los docentes de la Universidad Europea Noemi Martín, Beatriz Lores y Jairo García. El mentor de este proyecto es Sergio Calvo, vicerrector de Relaciones Institucionales y Vida Universitaria; y el impulsor es Miguel Carmelo, CEO de la Universidad Europea.