Los trabajos se desarrollan en la zona de reserva del Parque Alamillo y se están reutilizando, entre otros, materiales de la Expo92.
A través del proyecto “Herramientas de mejora de zonas verdes urbanas para herpetofauna amenazada por el cambio climático”, HyT Asociación y el profesor del grado de Medio Ambiente de la Universidad Europea Álvaro Luna están acometiendo, desde comienzos de 2021 y hasta mediados de 2022, una serie de acciones encaminadas a crear hábitats acuáticos en el parque del Alamillo (Sevilla). Se trata de un proyecto que cuenta con el apoyo de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico y para el que en todo momento se está contando con la estrecha colaboración del personal técnico del Parque del Alamillo de Sevilla y de la Delegación de Medio Ambiente de Sevilla de la Junta de Andalucía.
En la primera fase del proyecto se han realizado 6 charcas dentro de la zona de reserva de viveros del mencionado parque que se suman a una charca ya existente que se ha adecuado tras la retirada de especies exóticas y el cambio del origen del agua de llenado de esta. Las charcas se han diseñado con diferente tamaño, profundidad e hidroperíodo, ubicándose en diferentes puntos estratégicos que permitan la colonización natural de diferentes especies y la comunicación entre los puntos seleccionados. Pare ello se han utilizado distintos materiales, entre los que se encuentran lonas almacenadas en el Parque desde la Exposición Universal de 1992 y que aún se encuentran en buen estado. Una vez creadas se ha procedido a adecuar este entorno creando refugios dentro de las charcas y se ha procedido a facilitar la creación de una comunidad vegetal compuesta por especies acuáticas sumergidas propias de la zona.
Tras los primeros meses desde la realización de las charcas se ha podido comprobar la presencia de algunos anfibios y reptiles, incluso la cópula de culebras viperinas, y cómo diversos invertebrados como las libélulas completan su ciclo de vida. Las plantas acuáticas se han expandido de forma natural, creando refugio para las larvas de anfibios que ahora habitan las charcas. Los próximos pasos para dar incluyen la mejora estética del entorno de algunas charcas a fin de completar su naturalización para lo que se recurrirá a vegetación mediterránea, así como el seguimiento de la colonización natural de diferentes especies y la translocación de especies de anfibios autóctonos que se encuentran al borde de la desaparición en la ciudad de Sevilla, como el gallipato, el sapillo pintojo y la ranita meridional.
El proyecto tiene el apoyo de la Estación Biológica de Doñana, la Universidad de Sevilla y cuenta con los permisos pertinentes de la Junta de Andalucía.