Con los resultados de la investigación, se han conocido las fortalezas y deficiencias de dichos programas, se ha comprobado su eficacia y se han obtenido resultados para seguir profundizando en este fenómeno delictivo y poder reajustar y mejorar las intervenciones.
Un grupo de investigadoras de la Universidad Europea ha presentado recientemente las conclusiones de un estudio en el que han analizado la eficacia de las intervenciones penitenciarias de seguridad vial en penas y medidas comunitarias (TASEVAL Y PROSEVAL), en las Jornadas sobre Medidas Alternativas y Justicia Restaurativa en el Ámbito Penitenciario, organizadas por la Facultad de Derecho de la Universidad de Sevilla. Con los resultados de la investigación, se han conocido las fortalezas y deficiencias de dichos programas, se ha comprobado su eficacia y se han obtenido resultados para seguir profundizando en este fenómeno delictivo y poder reajustar y mejorar las intervenciones. En este estudio, que comenzó en 2019 y ha tenido una duración de un año y medio, también han colaborado profesionales penitenciarios y colaboradores que desarrollan las intervenciones en todo el territorio español.
En palabras de las propias investigadoras, lo más sorprendente es el cambio de perfil que se ha dado en los últimos años en los usuarios de las intervenciones. “Además, sorprenden los problemas de adicciones y emocionales, las falsas creencias respecto a la seguridad vial y la baja percepción del riesgo con ausencia de miedo en la realización de conductas viales desviadas”, han destacado. No obstante, la investigación refleja que “las intervenciones están dando respuesta positiva a la reinserción, están funcionando, aunque hay necesidad de actualización sobre algunos aspectos”.
En este trabajo, denominada “Estudio de eficacia de los Talleres en Seguridad Vial”, han participado Cristina Escamilla Robla y Elisa Giménez Fita (Docentes e Investigadoras de la Universidad Europea de Valencia en los Grados de Criminología y Psicología), personal perteneciente a la Subdirección General de Medio Abierto y Penas y Medidas Alternativas, así como profesionales de Servicios de Gestión de Penas y Medidas Alternativas (Secretaría General de Instituciones Penitenciarias-Ministerio del Interior). Las investigadoras, consideran que se debe “conocer mejor a los conductores condenados en diferentes aspectos (psicológicos, criminológicos, sociodemográficos y su perfil como conductores) para adaptar adecuadamente las intervenciones”.
“La sociedad debe tener en cuenta que los usuarios de las vías somos toda la población y que al volante se sitúa todo tipo de personas, por lo que estamos todos expuestos a las graves consecuencias que puede provocar un conductor o conductora, por ejemplo, bajo la influencia del alcohol, o conducir sin vigencia en su permiso; así como las repercusiones penales, laborales o personales en la propia persona condenada que se derivan a causa de la comisión del delito”, han señalado las investigadoras, que se han mostrado muy satisfechas con este estudio que profundiza en la delincuencia vial.