El filósofo Javier Sádaba y el médico Benjamín Hereros se dieron cita el jueves 12 de mayo en el tercer Diálogo de Ética y Ciencia de la Universidad Europea , organizado en el Colegio de Médicos de Madrid, para debatir acerca de cuestiones éticas al final de la vida.
Con los Diálogos de ética y ciencia se pretende hablar sobre problemas candentes del mundo de la ciencia. Problemas sobre los que es importante pensar, argumentar y dialogar. Así, en las sesiones el diálogo se establece entre dos referentes en la materia a tratar que conversan de manera abierta, sin guion previo, y en los que los asistentes tienen la oportunidad de preguntar, dar su opinión o intervenir en el transcurso de la sesión.
En la tercera edición de estas sesiones –moderada por Joaquín García-Romanillos, Director de la Cátedra Memoria de la Transición de la Universidad Europea– Benjamín Hereros se apoyó en su experiencia para apuntar que, en ocasiones, existe entre los médicos posturas excesivamente vitalistas que pueden llevar a una obstinación diagnóstica, así como a olvidar que el objetivo de la medicina no es sólo curar, sino también aliviar.
Javier Sádaba, por su parte, quiso hablar de su experiencia tras la pérdida reciente de su esposa, como consecuencia de un cáncer. Así, el filósofo hizo hincapié en las etapas en el final de la vida, cuando éste viene provocado por una larga enfermedad.
En su opinión, es necesario diferenciar el pre, donde señaló los cuidados paliativos como fundamentales; el momento de la muerte, en el que, desde su punto de vista se plantea el problema de determinar hasta qué punto el paciente tiene consciencia de lo que está ocurriendo y; finalmente, el duelo posterior que padece el familiar y en el que éste pierde parte de su identidad.